Durante una sesión especial del Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU) fueron aprobadas hoy por unanimidad dos resoluciones en las que se exhorta a todas las naciones a prohibir la incitación al terrorismo y a evitar que las crisis internas desemboquen en conflictos armados. Los líderes de las 15 naciones integrantes del consejo, entre ellos el presidente chino Hu Jintao , el presidente estadounidense George W. Bush, el presidente ruso Vladimir Putin y el primer ministro británico Tony Blair, asistieron a esta rara reunión de alto nivel del CSNU. El encuentro, presidido por la presidenta de Filipinas Glora Macapagal-Arroyo, cuyo país ocupa la presidencia del consejo en septiembre, se llevó a cabo después de inaugurar la cumbre de la ONU a la que asisten 153 jefes de estado y de gobierno y funcionarios de alto nivel de otras 40 naciones. El proyecto de resolución patrocinado por Gran Bretaña pide a todas las naciones "prohibir por ley la incitación a cometer un acto o actos de terrorismo, para evitar tal comportamiento" y negar un refugio seguro a todos aquellos que sean seriamente considerados culpables de tal comportamiento. También exhortó a la cooperación internacional "para contrarrestar las ideologías extremistas violentas, incluyendo medidas para evitar la subversión de las instituciones educativas, culturales y religiosas por parte de los terroristas y sus simpatizantes". La otra resolución, patrocinada por Argelia, Benin y Tanzania, pide mayores esfuerzos de la ONU para evitar que las crisis internas desemboquen en conflictos armados y para evitar que los conflictos solucionados sean reavivados. La resolución se centra de manera particular en Africa y pide una efectiva asociación para la paz y el desarrollo entre el CSNU y la Unión Africana. "El terrorismo constituye un ataque directo contra los valores representados por la ONU: el régimen de derecho, la protección de civiles, la solución pacífica de los conflictos y el respeto mutuo entre los pueblos de diferentes creencias y culturas", dijo durante la reunión el secretario general de la ONU Kofi Annan. "Por lo tanto debemos estar en la primera línea de lucha contra el terrorismo", dijo. A la cabeza de la estrategia se encuentra disuadir a los grupos descontentos de elegir el terrorismo como táctica, dijo Annan, quien agregó que la comunidad internacional debe completar una convención global que proscriba el terrorismo en todas sus formas. "Tenemos la obligación solemne de detener el terrorismo en sus etapas iniciales", dijo Bush durante la sesión. "Tenemos que hacer todo lo que podamos para afectar cada una de las etapas de planificación y de apoyo para las tácticas terroristas". Bush dijo que los Estados Unidos apoyan la necesidad de mejorar la capacidad de la Unión Africana y de las organizaciones subregionales para desplegar elementos tanto civiles como militares para evitar los injustos conflictos armados. "El terrorismo no será derrotado hasta que nuestra determinación sean tan completa como la de ellos, nuestra defensa de la libertad es tan absoluta como la de ellos es en relación con el fanatismo", dijo Blair al consejo, y agregó que "aprovechan nuestras divisiones y explotan nuestras vacilaciones2. El ministro de Relaciones Exteriores de Japón, Nobutaka Machimura; el primer ministro francés, Domonique de Villepin; y los jefes de estado o de gobierno de Argelia, Argentina, Benin, Brasil, Dinamarca, Grecia, Rumania y Tanzania, también asistieron al encuentro. (15/09/2005, Agencia de Xinhua) |