SANTIAGO, 22 ene (Xinhua) -- El valor de las exportaciones de América Latina y el Caribe cayó un 13 por ciento en 2020, en el peor desempeño registrado en la región desde la crisis financiera de 2008, a causa de la pandemia global del nuevo coronavirus y las restricciones adoptadas para evitar su propagación, según un informe divulgado hoy viernes por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

La CEPAL señaló también que las importaciones de los países de la región latinoamericana se redujeron un 20 por ciento el año anterior, arrastrando una tendencia a la "reprimarización y fragmentación regional" que la pandemia agudizó.

El documento "Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2020" fue presentado de manera virtual por la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, quien llamó a profundizar la integración regional como un "elemento clave" para impulsar la recuperación, así como a disminuir las desigualdades de género en el comercio.

Bárcena instó a los países y mecanismos multilaterales a "profundizar la integración para impulsar la recuperación regional", dado que Latinoamérica y el Caribe "se 'desintegra' comercial y productivamente desde mediados de la década pasada", lo que es "muy preocupante", dado que el comercio intrarregional "es el más conducente a la diversificación productiva, la internacionalización de empresas y la igualdad de género".

En este contexto, la CEPAL promovió avanzar en una agenda compartida sobre facilitación del comercio, infraestructura de transporte y logística, además de fomentar la cooperación digital para generar sinergias regionales en sectores dinamizadores clave.

"Son los mercados regionales los que nos hacen resilientes a choques, y los nuestros son poco resilientes", explicó Bárcena en su conferencia, y respaldó una "mayor convergencia entre los distintos mecanismos de integración para superar la fragmentación regional y apoyar una recuperación sostenible e inclusiva".

Asimismo, la secretaria ejecutiva destacó la importancia de impulsar la participación de las mujeres trabajadoras y emprendedoras en sectores dinamizadores y en las cadenas productivas regionales, para lograr una "recuperación transformadora con igualdad de género y sostenibilidad".

Según el informe, la pandemia de la COVID-19 ha intensificado varias tendencias que ya se perfilaban en el comercio mundial, entre ellas el creciente nacionalismo económico y la conflictividad en las relaciones comerciales.

También ha intensificado el debilitamiento de la cooperación multilateral, la digitalización de la producción y del comercio, y la tendencia a la regionalización de la producción mediante el "nearshoring" (localización de proveedores en países más cercanos al mercado objetivo) y el "reshoring" (relocalización de procesos productivos y tecnológicos estratégicos al país de origen).

En este escenario, y pese a la pandemia que continúa, el documento precisó que el repunte de los precios de productos básicos y el aumento de la demanda por parte de Estados Unidos, China y Europa generaron condiciones para una "incipiente recuperación" de las exportaciones de la región a partir de la segunda mitad del 2020, pero añadió que dicha mejora se encuentra sujeta a una considerable incertidumbre, debido a los rebrotes que han ocurrido en varios países y la lentitud del acceso a la vacunación.

En un 2020 marcado por la crisis sanitaria y económica, la CEPAL estimó que Centroamérica exhibió la menor caída de sus exportaciones (2 por ciento), dado que el comercio entre los países centroamericanos representa el 25 por ciento de los envíos de la subregión y se concentra en productos esenciales.

En tanto, el comercio de América del Sur y México marcarían cada uno una contracción de 13 por ciento, similar al promedio regional, y el Caribe de 16 por ciento.

Bárcena dio cuenta, además, que por primera vez este informe presenta un capítulo especial sobre las desigualdades de género en el comercio internacional, en el que las mujeres están concentradas en los sectores textiles y de confección, entre otros servicios como el turismo, mientras que los hombres abarcan todo el resto de los sectores exportadores.

Ahí se explica que la COVID-19, el cierre de fronteras, las restricciones a la movilidad y la caída del comercio, impactaron directamente a las trabajadoras y empresarias vinculadas al turismo, especialmente en el Caribe, y en la industria textil y la confección para la exportación, particularmente en Centroamérica y México.

De esta manera, la CEPAL remarcó la importancia de fortalecer la integración y complementación productiva regional, asegurando la participación de las mujeres en sectores estratégicos para el cambio estructural con igualdad de género en un mundo pospandemia. Fin