WASHINGTON, 29 oct (Xinhua) -- La actividad económica de Estados Unidos en el tercer trimestre creció a una tasa anual de 33,1 por ciento después de una fuerte contracción en el trimestre anterior, informó hoy el Departamento de Comercio estadounidense.

A pesar del repunte aparentemente rápido, la economía de Estados Unidos en el tercer trimestre tuvo una reducción de 2,9 por ciento en comparación con el año pasado, de acuerdo con cálculos por adelantado de la Oficina de Análisis Económico del departamento.

El nivel del producto interno bruto (PIB) real permanece por debajo del máximo antes de la pandemia (cuarto trimestre de 2019), y de donde habría estado si el firme crecimiento hubiera continuado, señaló David Wilcox, miembro del Instituto Peterson de Economía Internacional.

"El crecimiento tendría que haber sido de 53,3 por ciento en el tercer trimestre para que el PIB retornara a su pico previo, y 63.7 por ciento para retener la anterior tendencia", dijo Wilcox, indicando que "aún queda mucho por hacer".

La economía aún es alrededor de 3,5 por ciento menor que lo que era al final del año pasado, antes de la devastación de la pandemia.

Gregory Daco, economista en jefe estadounidense de Oxford Economics, dijo en Twitter que en el tercer trimestre el PIB está "rompiendo récord y es insignificante al mismo tiempo".

El gasto del consumidor es 3,3 por ciento menor al nivel previo a la pandemia, y la inversión empresarial es 4,9 por ciento inferior, indicó Daco. Las exportaciones tienen una disminución de 15,3 por ciento y las importaciones bajaron 7,1 por ciento.

El gasto del gobierno federal aumentó 2,6 por ciento, mientras que el gasto del gobierno estatal y local se redujo 1,9 por ciento, señaló.

El avance del tercer trimestre fue impulsado por un "aumento" en el gasto del consumidor encabezado por la demanda de productos, y un "mercado inmobiliario al rojo vivo" impulsado por el aumento de ingresos con estímulos fiscales y tasas de interés históricamente bajas, explicó Daco.

El repunte tuvo lugar después de que la economía se hundió en una tasa anual revisada de 31,4 por ciento en el segundo trimestre en medio de las crecientes repercusiones de la COVID-19, el cual ha sido el mayor descenso desde que el gobierno estadounidense empezó sus registros en 1947.

En el primer trimestre, la economía de Estados Unidos se desplomó a una tasa anual de 5 por ciento, señalando el fin de una década de expansión económica luego de la crisis financiera global.

"El incremento del producto interno bruto (PIB) en el tercer trimestre reflejó los continuos esfuerzos para reabrir los negocios y reanudar actividades que fueron aplazadas o restringidas debido a la COVID-19", de acuerdo con el cálculo anticipado publicado por la Oficina de Análisis Económico.

El aumento en el PIB real en el tercer trimestre reflejó los incrementos en el gasto de consumo personal, la inversión en inventarios privados, las exportaciones, la inversión fija no residencial e inversión fija residencial, compensado parcialmente por el descenso en el gasto del gobierno federal y en el gasto de los gobiernos estatales y locales, mostró el informe.

Economistas y funcionarios de la Reserva Federal han argumentado reiteradamente que se necesita más apoyo fiscal para sostener la recuperación económica de Estados Unidos, pero el Congreso y la Casa Blanca continúan en un punto muerto respecto a la siguiente ronda del proyecto de ley de ayuda por la COVID-19.

La presidenta de la Cámara de Estados Unidos, Nancy Pelosi, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, recientemente sostuvieron conversaciones, pero prevalecieron importantes diferencias. Ante la cercanía de día de la elección, es poco probable que el Congreso apruebe algún paquete de ayuda antes de que concluya la votación, indican analistas. Fin