BUENOS AIRES, 6 may (Xinhua) -- El ministro de Economía de Argentina, Martín Guzmán, insistió hoy en la necesidad de un pronto acuerdo con los acreedores privados para reestructurar la deuda externa, aunque afirmó que "todavía hay tiempo" para convenir exitosamente un canje.

"Algunos acreedores han aceptado la oferta que hicimos y otros están tratando de alcanzar un acuerdo. Todavía tenemos tiempo, pero es vital restaurar la sostenibilidad de la deuda", afirmó Guzmán durante una conferencia virtual con expertos de la Universidad de Columbia (EE. UU.).

En la videoconferencia titulada "Argentina, entre el COVID-19 y la crisis de deuda soberana", el funcionario ofreció detalles de la oferta de canje elaborada desde el Gobierno argentino, la cual ya ha sido rechazada por tres grandes grupos de acreedores, entre los que se encontraron fondos como BlackRock, Templeton y Fidelity.

Guzmán insistió ante los participantes del encuentro virtual que la deuda argentina es "no financiable, inasequible e insostenible", por lo que estableció que el canje "requiere una contribución apreciable de los acreedores privados".

"Sin reestructuración de la deuda, el valor de la deuda del gobierno de Argentina se encontrará en una senda divergente", advirtió el ministro.

"Es nuestra intención llegar a un acuerdo en común con nuestros acreedores", agregó, al tiempo que destacó que una resolución entre las partes es necesaria "para una relación sana y duradera" con los bonistas.

Sobre la crisis desatada por el nuevo coronavirus (COVID-19), el ministro señaló que "el brote epidémico encuentra a la Argentina en una de las recesiones más largas y profundas de su historia".

Sobre este particular descartó mayores ajustes fiscales en el país en medio de la pandemia, al considerar que sería un hecho "desestabilizante".

La propuesta de reestructuración presentada formalmente por el Gobierno argentino en abril, contempla una quita de 5,4% sobre el capital adeudado (3600 millones de dólares), una reducción de intereses del 62%, equivalente a 37.900 millones de dólares más un período de gracia de tres años.

El Ejecutivo ha manifestado que se encuentra "abierto al diálogo" con los bonistas a fin de lograr un acuerdo que se enmarque en la "sostenibilidad de la deuda".

De acuerdo con el cronograma de negociación del Ejecutivo, el próximo 8 de mayo vence el plazo para que las partes concreten un acuerdo, sin embargo, las negociaciones pueden extenderse en virtud de mejorar los planteamientos y alcanzar una resolución. Fin