SANTIAGO, 11 oct (Xinhua) -- El ministro de Agricultura chileno, Antonio Walker, anunció hoy que iniciará en el gobierno un trabajo legislativo para reforestar las cerca de 600 mil hectáreas afectadas por los incendios del 2017.

El ministro además instó a la cooperación entre pequeños y medianos productores madereros, perjudicados por las consecuencias del mega incendio forestal que destruyó grandes predios en las regiones centrales de O'Higgins, Maule y Biobío hace un años atrás.

"El sector forestal es un sector al que sí le viene muy bien la asociatividad dado lo disperso de sus productores. Hay de más de 22 mil pequeños productores que lo conforman", dijo a la prensa el ministro.

Puso acento en la falta de materia prima para el funcionamiento de los aserraderos, una de las principales fuentes laborales de esa zona, mientras que informó sobre la puesta en marcha nuevamente de la "Mesa de la Madera", que se creó durante el primer gobierno del presidente Sebastián Piñera (2010-2014), con representantes del sector público y privado.

Abordó también junto a los pequeños y medianos agricultores las consecuencias directas de los incendios del 2017, que han generado problemas de abastecimiento en esa zona principalmente forestal y agricultora.

Asumió como compromiso el reimpulso al fomento de las plantaciones forestales, ya que el gobierno "no puede dejar que este sector que ha sido tan importante para la economía del país se nos muera, se nos duerma", aseveró.

"Hemos tenido incendios que nos han afectado muchísimo. Necesitamos volver a tener plantaciones forestales. Tenemos 2,7 millones de hectáreas, entre pinos y eucaliptus, más de 14 millones de hectáreas de bosque nativo que además nos hacen que la agricultura chilena tenga un efecto neutro entre emisión y absorción de CO2", explicó.

Según datos oficiales, Chile cuenta con 1 millón 90 mil hectáreas que están desprovistas de bosque y vegetación, que están en distintos grados de erosión y requieren urgentemente protección.

Esto a raíz del cambio climático y la emisión de temperatura que emiten los suelos, pero también por seguir evitando la erosión y disminuir la pobreza de las familias que son propietarias.

En 2017 se registraron diversos focos incendiarios a lo largo de Chile durante la temporada estival, que afectaron principalmente a la zona centro sur del país, que vio fuertemente perjudicada su producción maderera y agrícola, lo que generó millonarias pérdidas en las industrias del sector, pero principalmente empobreció a los pequeños emprendedores y familias dedicadas a este rubro. Fin