El gobierno ruso anunció hoy la suspensión de las importaciones de carne producida por dos de las 21 empresas frigoríficas de Brasil investigadas en la operación Carne Débil, acusadas de adulterar los productos previo a su venta.

El Ministerio de Agricultura de Brasil informó que las dos empresas frigoríficas pertenecen a la multinacional BRF, mayor productora de proteína animal del mundo y una de las empresas acusadas de adulterar la carne.

Rusia fue el cuarto mayor comprador de carnes brasileñas en 2016, con importaciones por valor de 1.030 millones de dólares.

Según el gobierno brasileño, desde que se descubrió el escándalo Rusia solicitó informaciones sobre determinadas empresas frigoríficas involucradas en la red de adulteración del producto.

Uno de las empresas frigoríficas vetadas por Rusia produce aves, mientras que la otra carne bovina.

El anuncio de las autoridades rusas de vetar la carne brasileña se produce después de que varios países rectificaron su decisión inicial de suspender las compras de carne brasileña, tras descubrirse la red que adulteraba el producto.

Según la policía brasileña, varias de las principales empresas cárnicas del país, entre ellas las multinacionales JBS y BRF, amparadas por fiscales sanitarios corruptos, "maquillaron" con productos químicos la carne que estaba en mal estado y que incumplía los requisitos para ser exportada.

El fraude iba desde cambiar la fecha de vencimiento del embalaje de carne ya caducada, hasta inyectar agua en la carne de pollo para alterar el peso o utilizar ácido ascórbico para enmascarar el deterioro de los productos.

Por el momento, el gobierno brasileño ha prohibido las exportaciones de 21 empresas frigoríficas sospechosas de adulterar la carne.

Según datos oficiales, Brasil es el mayor exportador mundial de carne bovina y de pollo, el cuarto en el segmento de cerdos, y las ventas externas de esos tres sectores representaron el año pasado el 7,2 por ciento de ese comercio, con 11.600 millones de dólares. F