México podría esperar para este año una inflación anual de 5,1 por ciento, la más alta registrada desde 2011, y que afectará a múltiples empresas, instituciones y a la población mexicana en general, coincidieron hoy especialistas.

Analistas consultados por Xinhua explicaron que las causas de la inflación son múltiples, sin embargo, existen dos factores clave: el aumento de los precios de las gasolinas en México y el encarecimiento del dólar con relación al peso.

El internacionalista Ignacio Martínez afirmó que el problema de una alta inflación, combinada con las bajas expectativas de crecimiento por parte del Banco de México (Banxico), anuncia un 2017 complicado para la economía mexicana.

En respuesta a estas expectativas, el Banco de México inició un ciclo de subida de tasas desde 2016, que colocaría la tasa de interés de referencia en 7,5 por ciento.

Este indicador guía a los bancos y otras instituciones financieras en operaciones de capital.

Ante este panorama, las pequeñas y medianas empresas (pymes) son las que se verán más amenazadas.

Por lo anterior, el experto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) recomendó invertir el gasto público en infraestructura, con lo que se lograría mermar el impacto de la inflación entre la población mexicana.

Asimismo, recordó que el consenso de analistas consultados por el Banxico ajustó a la baja sus pronósticos para el tipo de cambio, pero elevaron los de inflación.

La media de los pronósticos para el tipo de cambio al cierre del año que recién concluyó se ubicó en 21,15 pesos por dólar, una reducción de 55 centavos respecto al estimado de enero, y el primer pronóstico con ajuste a la baja en 10 meses, según el Banxico.

Esta misma semana, los analistas posicionaron a las presiones inflacionarias en México entre los principales elementos que podrían limitar el crecimiento económico de México en 2017, suceso que no figuraba entre los factores de riesgo para la economía desde agosto de 2008.

Además, el sistema de indicadores cíclicos, en su componente adelantado, advierte sobre una desaceleración de la actividad económica, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En indicador adelantado de enero, que busca definir anticipadamente la trayectoria de la actividad económica, reveló la mayor contracción en cerca de cinco años y medio.

Finalmente, el experto de la UNAM afirmó que en este año se espera que el poder adquisitivo de la población tenga una caída del 63 por ciento a raíz de la falta de condiciones para que los pequeños empresarios generen más empleos.

"Tenemos un escenario para los próximos tres años, donde México debe impulsar su mercado interno en torno a cadenas de distribución domésticas siempre y cuando se ataque de manera frontal a tres flagelos: corrupción, inseguridad y opacidad", agregó.