Más de 30.000 millones de dólares de dinero sucio ligado al crimen, la corrupción y la evasión de impuestos salen cada año de Brasil, reportó hoy la entidad Integridad Financiera Global (GFI, en inglés).
El comercio irregular es el modo principal de salida de dinero no declarado del país, el cual supone el 92,7 por ciento de los 401.600 millones de dólares que se calculan salieron de Brasil de 1960 a 2012, recordó la GFI.
Las pérdidas anuales equivalen al 1,5 por ciento de la producción de la economía brasileña, con un promedio de 33.700 millones de dólares anuales de 2010 a 2012, el doble en relación a la salida de 14.700 millones de dólares en la primera década del siglo XXI.
No obstante, la GFI calcula que las pérdidas son mayores, al tener en cuenta que sus cálculos no incluyen las grandes cantidades de contrabando de dinero, uno de los métodos más usados para mover dinero por parte de los narcotraficantes de drogas y otros criminales.
El estudio tampoco tomó en cuenta las negociaciones por servicios o transferencias financieras entre ramificaciones de corporaciones multinacionales.
"Brasil tiene un serio problema con los flujos financieros ilícitos, y combatirlo debe ser una prioridad para cualquier administración que gane las próximas elecciones", explicó el presidente de la GFI, Raymond Baker.
Enla actualidad la petrolera estatal Petrobras, la mayor empresa del país, está envuelta enescándalos de soborno e irregularidades en varios países, como Holanda y Estados Unidos.
Además, con la economía a la baja, flujos ilícitos de salida de dinero debilitan todavía más la economía, al drenar recursos que en Brasil pueden ser utilizados para el crecimiento nacional.
La economía informal en Brasil supone el 21,8 por ciento del producto interno bruto (PIB), inferior al 55 por ciento que representaba en 1970, debido al crecimiento regular del país, aunque no obstante, los ingresos altos de "dinero sucio" es una preocupación.
"Durante muchos años hemos observado la reticencia de Brasil de dirigirse a los problemas de fuga de capital y flujos ilícitos", apuntó Baker, quien recomendó más cooperación entre gobiernos para encerrar los canales de lavado de dinero y una mayor transparencia en transacciones financieras internacionales. F