Las economías emergentes de Asia siguen avanzando a pesar del impacto de la crisis de la deuda en Europa, la lenta recuperación económica mundial, y el temido "Precipicio Fiscal" de EEUU.
Estas economías obtuvieron buenos resultados en 2012, aunque su tasa de crecimiento fue inferior a la esperada. Un informe de Naciones Unidas divulgado recientemente muestra que se prevé un crecimiento económico de Asia Pacífico en 2012 de un 5,6 por ciento, cifra reducida desde la anterior previsión del 6,5 por ciento.
Para 2013, los economistas se muestran generalmente optimistas sobre el crecimiento continuado de Asia Pacífico, y se espera que la fuerte demanda doméstica compense el débil crecimiento de las exportaciones.
Goldman Sachs publicó recientemente su informe Asian Economic Outlook 2013, en el que expresa optimismo sobre las perspectivas económicas para la región el año que viene, excluyendo a Japón.
El informe prevé que Asia crecerá una media de un 6,9 por ciento en 2013 para expandirse aún más, un 7,3 por ciento, desde 2014 a 2016.
TENDENCIA EMERGENTE PARA LAS ECONOMIAS ASIATICAS
Singapur, más abierto al mundo, fue obviamente el más afectado por la débil economía global. La Unión Europea (UE) es el segundo socio comercial más grande de Singapur, superado solo por Malasia.
Según los datos oficiales, el comercio bilateral entre Singapur y la UE alcanzó 106.000 millones de dólares singapurenses (unos 86.900 millones de dólares) en 2011, un incremento de un 7 por ciento. Este año, las exportaciones no petroleras de Singapur a la UE cayeron un 16,5 por ciento en el tercer trimestre del año.
Basándose en las débiles exportaciones del tercer trimestre, la Junta Empresarial Internacional de Singapur prevé que el crecimiento de las exportaciones domésticas no petroleras se reducirán entre un 4 y un 5 por ciento hasta entre un 2 y un 3 por ciento este año, mientras que el año que viene crecerán un 2 por ciento hasta situarse en un 4 por ciento, lo que llevará al total del comercio a crecer entre un 3 y un 4 por ciento.
Según el Ministerio de Comercio e Industria, el crecimiento económico de Singapur en el tercer trimestre de 2012 sigue estancado. Durante el primer trimestre, el PIB creció un 1,6 por ciento, en el segundo trimestre el crecimiento fue de un 2,5 por ciento, y en el tercer trimestre solo un 0,3 por ciento.
En Indonesia, mientras que el banco central ha previsto un crecimiento de un 6,2 por ciento en el cuarto trimestre del año, el crecimiento total de 2012 será de un 6,3 por ciento, cifra que se encuentra dentro de la previsión de crecimiento para el país en este año.
Sin embargo, las exportaciones de Indonesia reflejan una ralentización en la demanda externa. Según los datos publicados por el Buró Central de Estadísticas, en octubre Indonesia exportó 15.670 millones de dólares, mientras que importó 17.210 millones de dólares, lo que deja con un déficit de unos 1.550 millones de dólares, cifra récord de déficit comercial mensual para Indonesia.
Wellian Wiranto, estratega de inversión de Asia para Barclays, dijo durante una entrevista con Xinhua que en Indonesia, la demanda doméstica es el principal motor del crecimiento económico para este año y el año que viene.
Después de las devastadoras inundaciones de 2011, las exportaciones de Tailandia se han recuperado gradualmente. Según datos oficiales, el valor total de las exportaciones de Tailandia en octubre se incrementaron en un 15,57 por ciento interanual, principalmente debido a la recuperación de las exportaciones de productos agriculturales y procesados, así como de otros productos industriales.
En cuanto a la India, los expertos han llamado a "reiniciar" el país. Las altas tasas de crecimiento de la India, de entre un 8 y un 9 por ciento, se han revisado a la baja hasta situarlas en un 5,5 por ciento, la cifra más baja desde 2004.
Wiranto dijo que en general, Asia ha mostrado buenos resultados a pesar de la situación en la eurozona y el temido "Precipicio Fiscal" de EEUU.
Albert Hu Guangzhou, profesor asociado de la Universidad Nacional de Singapur, dijo en una entrevista que las economías emergentes de Asia Pacífico han tomado las medidas oportunas para hacer frente a los factores externos, añadiendo que estas medidas "proactivas" han estimulado la demanda doméstica para compensar la caída de los ingresos de las exportaciones.
"A corto plazo, estas políticas han conseguido ciertos resultados positivos en la mayoría de los países", dijo Guangzhou.
En Filipinas, el crecimiento económico del país durante los primeros tres trimestres del año fue de un 6,5 por ciento. Durante el segundo trimestre creció un 7,1 por ciento, lo que la coloca en segundo lugar después de China. Filipinas espera crecer más de un 6 por ciento en 2012.
EL ROL DE CHINA LIDERANDO LA RECUPERACION REGIONAL
Los analistas también han señalado que los datos recientes de China muestran signos de un "aterrizaje suave" para la recuperación económica del próximo año en toda la región. Wiranto cree que el nuevo liderazgo de China se centrará en políticas y claridad para que China pueda alcanzar la transformación económica.
Wiranto prevé que el crecimiento de China el próximo año supere el 8 por ciento. "La recuperación de China no solo mejorará la confianza del mercado, sino que también aumentará la velocidad del crecimiento económico de las economías asiáticas, porque el comercio entre las economías emergentes de Asia se está volviendo cada vez más importante", afirmó Wiranto.
El economista senior de Moody's Analytics, Glenn Levine, destacó en un informe reciente que China impulsará a toda la región asiática, añadiendo que si la economía de China mejora, ésta sin duda impulsará a las otras economías de la región.
Levine cree que las economías asiáticas en 2013 continuarán mostrando un notable crecimiento. Esto podría ser provocado por un mayor gasto en proyectos de infraestructuras y reformas económicas sanas, particularmente atrayendo inversión extranjera.
La estable recuperación económica de China, las reformas estructurales en los países de la eurozona y los perceptibles avances en la economía de EEUU, podrían ayudar a mantener el ritmo de crecimiento de las economías de Asia.