La pasión por la inversión en China está ahora enfocándose en unas nuevas estrellas en alza, que son los vinos y licores, tal y como ha evidenciado el optimismo de los comerciantes de bebidas alcohólicas que participaron en una feria recién clausurada.
Más de 150.000 comerciantes tomaron parte en la 86ª edición de la Feria Nacional de Alimentación, Vinos y Licores, que concluyó el lunes en Chengdu, capital de la provincia de Sichuan.
Durante el evento se habló mucho del crecimiento del mercado chino de vinos. Por su parte, Li Zhaowen, comerciante de vinos franceses, espera un importante incremento de los pedidos de comercios chinos para cubrir la creciente demanda.
La inversión global en los vinos empezó a crecer con rapidez a finales de 2008. Según el Índice de 100 Variedades de Vinos de la Bolsa Internacional de Vinos de Londrés, que representa las fluctuaciones de los precios de los 100 vinos más cotizados del mundo, el precio de los vinos se disparó un 70 por ciento entre enero de 2009 y comienzos de 2012.
En el mercado de vinos, sólo el 0,1 por ciento de productos están disponibles para los inversionistas, pero con sus elevados ingresos, muy por encima de los del oro y los diamantes, ha despertado el interés de muchos chinos.
En 2011 se inauguró la Bolsa de Vinos de Shanghai en calidad de plataforma para negociar con vinos en forma de futuros y mercancías al contado, en lo que constituyó la titulización del mercado chino de vinos selectos.
El mismo año se estableció en China el primer fondo de futuros de vinos, bautizado "De-Rouge", que hasta la fecha ha recaudado más de 100 millones de yuanes (15,9 millones de dólares).
El interés por invertir en las bebidas alcohólicas también se percibió en el mercado nacional de licores, que desde 1999 ha experimentado alzas de los precios que han multiplicado el promedio por entre cinco y siete, incluso hasta 10 en los casos de algunas marcas prestigiosas.
El conocido licor tradicional chino Moutai sufre una escasez de existencias desde que su precio superó los 2.000 yuanes por botella.
En 2011, otra marca prestigiosa china, Luzhou Laojiao, cooperó con la Corporación Bancaria Minsheng de China para presentar el primer producto financiero de licor de China, que ofrecía una tasa de rentabilidad anual del 4,2 por ciento y se agotó en medio día, recaudando un total de 200 millones de yuanes.
Otros bancos chinos siguieron los pasos de Minsheng y desarrollaron varios productos financieros relacionados con licores, con la finalidad de sacar partido de la pasión de los inversores chinos por comprar tales productos y de esta manera neutralizar el impacto de la inflación en sus riquezas personales.
Zhang Xiaozhong, analista del banco de las Tres Gargantas de la municipalidad suroccidental de Chongqing, señaló que una titulización favorable de la inversión en licores conlleva una mayor liquidez para las empresas de licores, aliviando así la presión sobre sus flujos de capital.
No obstante, el especialista también advirtió del limitado margen de beneficios de los vinos importados debido a su complicado proceso de reventa así como los aranceles aduaneros y los impuestos. "La inversión en estos productos requiere que los inversores tengan buenos conocimientos profesionales", resaltó. Fin