El acelerado ritmo y creciente volumen de las exportaciones, las fuertes inversiones, y el aumento del consumo, situarán al crecimiento económico de China en el 11,2% en 2007, por encima de su cálculo anterior del 10%, con la tasa de inflación superando el 4%, de acuerdo con un informe del Banco Asiático de Desarrollo (BAD).
"El crecimiento más rápido de lo esperado que está experimentando el país durante este año llegará hasta el 2008", comentó Zhuang Jian, economista de la Misión Residente de China del BAD, en una rueda de prensa.
En su nuevo informe, la entidad pronosticó que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de China en 2008 llegará al 10,8%, cifra que reemplaza al 9,8% incluido en un informe dado a conocer en marzo.
Zhuang manifestó que la economía de China creció un 11,5% en la primera mitad de 2007, la tasa más alta desde 1994.
Según el especialista bancario, el rápido crecimiento económico del país ha estado liderado por la industria, sobre todo en los sectores siderúrgico, químico, eléctrico, y de procesamiento de petróleo.
La gran rentabilidad, las animadas ventas, y los bajos intereses de los préstamos, también aceleraron la inversión durante el citado período, agregó Zhuang.
El informe del BAD añadió que la inversión de los gobiernos locales creció un 28,1% en los primeros seis meses de este año, casi duplicando la tasa establecida por el gobierno central.
El barómetro de la inflación, el Índice de Precios al Consumidor (IPC), podría alcanzar el 4,2% este año, y el 3,8% en 2008, en contra de los pronósticos previos del 1,8 y el 2,2 por ciento, respectivamente, de acuerdo con el informe.
Zhuang señaló que el alza en los precios de los cereales en todo el mundo y la epidemia de la enfermedad porcina de la oreja azul en China han sido los principales responsables del aumento en los precios de los alimentos, aunque esta situación se aliviará el próximo año, allanando el camino para las programadas reformas de precios en sectores controlados por el estado, como acueducto, electricidad, y gas natural.
El informe del BAD también pronosticó que en la segunda mitad del 2007, las exportaciones de China crecerán en un 20%, y las importaciones en un 16%, lo que resultará en un superávit comercial anual de unos 300.000 millones de dólares, más del 60% del registrado en 2006.
Las exportaciones de China crecieron un 27,6% en el primer semestre de este año, excediendo el crecimiento de las importaciones, que fue del 18,2%, lo que amplió el superávit comercial hasta los 112.500 millones de dólares.
Zhuang mencionó que la tasa de crecimiento de algunas exportaciones podría reducir su ritmo en el segundo semestre de este año debido a nuevas políticas macroeconómicas. Desde el 1 de enero, se han impuesto aranceles de exportación a 142 productos, mientras que en julio se redujo o suprimió el reintegro de impuestos por concepto de exportación a 2.831 artículos.
El objetivo es refrenar el crecimiento del superávit comercial y a la vez aliviar la presión sobre el medio ambiente, a través de la reducción de la producción de artículos que requieren grandes consumos de energía y recursos naturales, y que causan una severa contaminación, agregó Zhuang.
El superávit comercial, que sigue siendo alto, y las inyecciones de capital, han fortalecido las reservas de divisas, complicando la política monetaria. El informe del BAD indicó que el actual superávit de China crecerá hasta un 10,9% del PIB este año y un 10,5% en 2008, por encima de los cálculos del 8,8 y el 8,9 por ciento, respectivamente, divulgados a principios de este año.
Posiblemente, la brecha entre el crecimiento de las exportaciones y el de las importaciones se reduzca a medida que las modificaciones en los aranceles de exportación y devolución de impuestos por este concepto entren en vigor, vaticinó Zhuang. |