Por RAFAEL VALDEZ MERA

 

Durante sus primeros días en Beijing, lo que más le sorprendió al fotógrafo chileno Ricardo Carrasco fue el diseño arquitectónico de los edificios altos. Si bien es reconocido por documentar temas relacionados con la naturaleza, los viajes y los pueblos ancestrales, en China le impactaron las obras de cemento. Carrasco llegó para presentar la exposición ‘Chile, país de grandes cumbres’, una muestra que no solo habla de volcanes.

China Hoy (CH): Chile, país de grandes cumbres es el nombre de la exposición fotográfica que lo trae por primera vez a Beijing. Hablar de ‘cumbres’ es hablar de la geografía chilena, pero ¿solo se refiere a nevados o a otro tipo de cumbres?

Ricardo Carrasco (RC): Aunque es la primera vez que estoy en China, mis obras ya han estado antes. En septiembre del año pasado, algunas de mis fotografías se exhibieron durante la actividad “Cruzando el Pacífico – Chile viene a la UIBE”, organizado por la Universidad de Economía y Comercio Internacional, en Beijing.

En esta ocasión traigo una muestra sobre varios volcanes chilenos, pero cuando decimos ‘cumbres’ también nos referimos metafóricamente al vínculo que se está estrechando cada vez más entre ambas naciones y que se refleja en reuniones comerciales e intercambio cultural, todas esas también son grandes cumbres. Entonces esto va más allá de mostrar la espectacular geografía chilena.

CH: ¿Qué espera que los ciudadanos chinos vean en sus fotos?

RC: China es un país que también tiene muchas bellezas naturales, pero yo sé que a ellos les gustan los nevados. Probablemente encuentren cosas especiales y diferentes en mis fotos. Lo que he traído es una recopilación de lugares que son remotos y que fueron fotografiados en épocas difíciles, por ejemplo, hay fotos de volcanes donde el acceso a la gente no estaba permitido, pero es donde la tierra se manifiesta de mejor manera, fueron condiciones extremas, con mucho frío, mucho calor o donde no había oxígeno por la altura.

CH: Revisando su obra da la impresión de que la preservación ambiental es una de sus grandes preocupaciones, de hecho, algunas de sus fotografías se han publicado en revistas como National Geographic, Natural History Magazine, GEO, ECOS, Birdlife International, todas ellas conocidas por su enfoque de conservación ambiental. Si tuviera que captar en China una foto relacionada con ese tema, ¿qué idea le viene a la mente?

RC: Buena pregunta… (Se queda unos segundos en silencio) China es un país tan grande que tendría que recorrerlo extensivamente para escoger un paisaje, pero podría decirte que me gustan los desiertos y las montañas.

CH: De la misma manera, su portafolio revela un extenso recorrido por culturas ancestrales como la incaica y los mayas. China, por su parte, también es una cultura milenaria. ¿Tiene previsto captar la esencia china en fotos?

RC: Claro que sí, talvez no ahora, pero en algún momento. En este viaje de acercamiento estoy fotografiando la arquitectura, aunque esa no es mi especialidad, yo soy especialista en fotos de viajes, naturaleza y culturas ancestrales principalmente de Sudamérica. Beijing me encantó, aunque es contaminada, el diseño de los edificios altos me fascinó. Justamente antes de venir acá estuve en Toronto, Canadá, fotografiando rascacielos porque es un tema que me llama mucho la atención.

CH: China es el primer destino de las exportaciones chilenas y tomando en cuenta que esta exposición es sobre cumbres en un sentido amplio, ¿de qué manera el arte y la fotografía pueden fortalecer la relación comercial y política entre Chile y China?

RC: La cultura debe desarrollarse con ese fin porque es el vínculo que nos une.

CH: ¿Ha conocido el trabajo de fotógrafos chinos?

RC: No. Aunque he visto imágenes muy buenas no sé de quiénes son exactamente. Es algo que tengo pendiente, pero lo haré porque si voy a volver, no quiero descubrir el agua caliente, entonces debo saber qué lugares de China ya han sido visitados por otros fotógrafos para ofrecer mi propia visión sobre eso.

CH: En el caso de los fotógrafos chilenos, ¿cuál es la tendencia en cuanto a los temas que abordan?

RC: Actualmente es muy fuerte el tema de las viñas, los vinos. Además hay un grupo de fotógrafos que se dedican a captar imágenes de la naturaleza y ha desarrollado durante unos 10 años un trabajo extensivo fotografiando Chile, pero aunque se trate de lugares que ya han sido mostrados antes, cada artista presenta su propia perspectiva, a uno le puede interesar la imagen de un lago con bruma; a otro, la vista aérea del mismo lago; así que son muchas miradas y distintos resultados.

CH: El calentamiento global es otro de los temas de los que se está hablando en todo el mundo. ¿Cómo, a través de la fotografía, se puede difundir la preservación?

RC: Nuestro trabajo es básico porque a uno le toca estar en situaciones donde el ambiente pudo haber sido dañado y debe tomar fotos para que eso se sepa. Hace 10 ó 15 años, en Chile se podía ver tubos y metales en el desierto o en los ríos, y si uno como fotógrafo está ahí, entonces debe mostrarlo. Los megaproyectos de infraestructura tienen mega consecuencias en el ambiente y si uno es testigo de lo que pasa, debe contarlo.

CH: Parece que hablara un fotoperiodista, ¿también ha trabajado en ese ámbito?

RC: Sí, también escribo. Mis artículos se han publicado en varios periódicos y revistas.

CH: ¿La fotografía le deja una sensación distinta a la escritura?

RC: Son complementos que hacen un producto final más interesante.

CH: Para concluir, de las cumbres de Chile que nos muestra hoy, ¿cuál es la que más le gusta y por qué?

RC: Bueno, a mí me gustan mucho los volcanes y en Chile hay más de 2000, afortunadamente no están todos activos porque sino no existiríamos (risas). Pero te diría que el volcán Llaima es uno de los que más me gusta porque tiene la particularidad de que si lo miras desde el norte tiene una forma distinta a que si lo miras desde el sur, y así desde cada ángulo. Es como si fueran volcanes diferentes, además que tiene una vegetación colindante con unos campos de lava alucinantes. En otoño, la vegetación es roja, los árboles son amarillos, la lava es negra, es uno de los lugares que más me gusta de Chile.

 

Publicado en la edición de Noviembre de la revista China Hoy

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