La historia de la presencia de la mujer en las obras de arte chinas es larga y se remonta al Periodo de los Reinos Combatientes y la dinastía Han del Oeste, cuando imágenes femeninas eran pintadas sobre tejidos de seda.

Cada época de la historia tiene su propio ideal de belleza y los artistas de todo el planeta han registrado, desde tiempos remotos, sus particulares conceptos sobre la belleza. Los pintores chinos no han sido la excepción. A través de los años, la imagen del ideal femenino de belleza ha estado ligada a las tendencias y políticas de cada época y gracias a su legado podemos lograr un mejor entendimiento de la historia de China.

Aunque resultaba común encontrar pinturas en las que la mujer era el tema central, estas no ganaron ningún respeto por ello. En la plástica china, la mujer es un mero objeto hermoso diseñado para ser exhibido o admirado. Es incluso posible vincular el crecimiento del despliegue femenino en el arte con la disminución de su estatus social.

Pinturas de mujeres en las dinastías del Sur y del Norte

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