A China le podría costar unos 20 años resolver el grave problema del esmog que viene afectando a las principales ciudades chinas, señaló hoy martes un experto alemán en medioambiente.

Ernst Ulrich von Weizsacker, copresidente del Panel Internacional de Recursos, recordó a Xinhua en una entrevista exclusiva que la contaminación del aire también causó quebraderos de cabeza a Alemania en los años 60 del siglo pasado.

Desde entonces, se adoptaron estrictas reglas para la calidad del aire en muchas ciudades, obligando a las centrales termoeléctricas, manufactureros de hierro y otras industrias a reducir sus emisiones contaminantes.

"Creo que la dependencia de China del carbón es casi la misma que la de Alemania en los años 60. En Alemania, se tardaron unos 20 años (en realizar los ajustes necesarios respecto a un modelo excesivamente dependiente de carbón), y esto también es factible para China", dijo Weizsacker.

Por otra parte, el experto dijo estar impresionado por la determinación de China por elevar su eficiencia energética y combatir la contaminación del aire en los próximos años.

Para el año 2020, la energía producida por combustibles no fósiles representará un 15 por ciento del consumo total de energía primaria de China, y la emisión de CO2 por unidad de PIB caerá en un 40-45 por ciento respecto al nivel de 2005, prometió el gobierno chino.

Hace tiempo que China sufre los embates de una contaminación severa, alcanzando niveles insospechados desde 2012. El mes pasado, el premier chino, Li Keqiang, describió la contaminación atmosférica como "una luz roja de la naturaleza para advertir contra un modelo de desarrollo ineficiente y ciego", y subrayó que China "declarará la guerra" a la contaminación.

Weizsacker se encuentra en Boao, un municipio de la provincia sureña china de Hainan, para asistir a la conferencia anual del Foro Boao para Asia, que dura de martes a viernes y que se celebra con el lema "Nuevo futuro de Asia: Identificar nuevos motores de crecimiento".