(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Con las cosas de comer no se juega. Así pensaron numerosos estudiantes en la Escuela Secundaria nº2 de Liupanshui, en la provincia sureña de Guizhou, que irrumpieron en el comedor de su centro académico a principios de esta semana destrozando las ventanas y volteando las mesas.

El incidente fue parte de la protesta de los estudiantes de dicho centro contra el aumento de los precios de los menús escolares, como consecuencia de la subida generalizada de precios en todo el país, que está generando cierta preocupación entre los ciudadanos chinos.

Los estudiantes se reunieron en la cantina escolar a las 22:20 del lunes para “pedir explicaciones”, tras anunciarse que el precio de la comida y del agua caliente habían subido entre 0,2 y 0,3 yuanes (0,03 dólares). En primer lugar se produjo una discusión entre los estudiantes y el personal de la cantina, disputa que acabó derivando en violencia con el destrozo del local, mesas rotas y ventanas hechas añicos, según indican fuentes oficiales citadas por Global Times.

En la protesta participaron unos 1.000 estudiantes, pero según el director del centro, Fan Guoqing, sólo unos 10 ó 20 estudiantes tomaron parte en los actos vandálicos, mientras que el resto se limitaba a jalearlos, según indica AFP.

La policía llegó unos 40 minutos después del inicio del desorden, cuando el lugar ya había sido arrasado. Con la llegada de los agentes de seguridad, los destrozos acabaron. Ninguna persona resulto herida durante los 20 minutos que duró la protesta.