Negociadores sobre el cambio climático procedentes de 177 países y organizaciones concluyeron hoy sábado en la ciudad septentrional china de Tianjin las conversaciones al respecto con algunos resultados positivos, aunque las grandes potencias y los países en vías de desarrollo aún mantienen diferencias sobre sus responsabilidades en materia de reducción de emisiones.
"A lo largo de esta semana logramos acercarnos a un juego estructurado de decisiones sobre las cuales podremos llegar a un acuerdo en (la Cumbre de) Cancún. Los delegados discutieron qué se podrá hacer allí y qué se podrá dejar para después", dijo la secretaria ejecutiva de la Convención Marco de la ONU sobre el Cambio Climático (UNFCCC), la costarricense Christiana Figueres.
Los negociadores también hablaron sobre elementos clave de operación en cuanto a finanzas, tecnología y construcción de capacidad, así como sobre el futuro del Protocolo de Kioto, añadió.
Sin embargo, los delegados no lograron llegar a un acuerdo sobre cómo asignar el "fondo de arranque rápido", de 30.000 millones de dólares, para apoyar a los países en vías de desarrollo, "pero en Cancún habrá un resultado final", vaticinó Figueres.
La funcionaria de la ONU también destacó que los negociadores lograron avances notables en el establecimiento de un nuevo fondo de financiación a largo plazo para afrontar los efectos del cambio climático, y aseguró que debatirán los detalles en la cumbre de fin de año en territorio mexicano.
No obstante, las discusiones sobre la prolongación del Protocolo de Kioto no fueron tan fructíferas, pero igualmente Figueres se mostró convencida de que el asunto saldrá mucho mejor librado en la reunión de Cancún.
Después de tres rondas de negociaciones en lo corrido del año, unos 3.100 delegados de 177 países bajo la UNFCCC y el Protocolo de Kioto se congregaron en Tianjin para allanar el camino que permita el logro de "resultados concretos" en la cita de Cancún, que se llevará a cabo entre noviembre y diciembre próximos.
Pero a diferencia de la ONU, la Unión Europea y Estados Unidos se mostraron menos satisfechos con las negociaciones de Tianjin, en las que sólo vieron "avances limitados". Sin embargo, todos los participantes confían y tienen la esperanza de que en la ciudad mexicana los resultados serán más positivos.
Un experto asesor de la Comisión Europea, Jurgen Lefevere, reconoció que aún hay sentimientos encontrados sobre asuntos como la transparencia, y consideró que el resultado de las conversaciones ha sido fragmentario.
Los frutos de las discusiones en algunos ámbitos esenciales fueron mucho menos que suficientes, dijo.
Pero "pese a que las discrepancias siguen siendo amplias, todavía tenemos grandes esperanzas ante (la cumbre de) Cancún", aseguró, por su parte, Peter Wittoeck, uno de los representantes de la UE durante una rueda de prensa realizada tras la clausura de las negociaciones.
"Nuestra confianza es real. Tenemos diferencias en algunos temas centrales, pero yo no diría que la confianza ha desaparecido", matizó Wittoeck, en respuesta a rumores sobre una supuesta pérdida de la confianza entre los participantes ante la parálisis de las negociaciones. "Es más bien como que no logramos el progreso que esperábamos", explicó.
A su vez, el enviado especial de Estados Unidos, Jonathan Pershing, admitió que sigue habiendo desacuerdos entre su país y China.
"Al parecer hasta el momento los intereses de los dos países no coinciden con las acciones de mitigación ni con la transparencia, con base en los acuerdos de Copenhague", dijo el negociador.
"Pero el proceso no ha terminado. Creemos que habrá un resultado exitoso en Cancún", sostuvo.
Pershing, sin embargo, dijo estar impresionado por los esfuerzos de China para reducir las emisiones. "China ha hecho grandes inversiones y tiene un compromiso enorme en el diseño de nuevas infraestructuras y en la implementación de programas de energías renovables", señaló.
"En general, el resultado de la reunión de Tianjin ha cumplido con nuestras expectativas originales", dijo, por su parte, Su Wei, el negociador jefe en materia de cambio climático de China.
Las conversaciones a lo largo de los últimos cinco días han significado progresos en la reducción de las diferencias y en la mejora del entendimiento mutuo entre las partes, sostuvo, y agregó que "cada uno ha venido trabajando duro para lograr un resultado equilibrado en la reunión".
Mediante los diálogos ha sido posible identificar varios problemas y mejorar el entendimiento, lo que sentará las bases para la próxima ronda de negociaciones, concluyó Su. Fin