En 2005 se cumple el 50 aniversario de la fundación de la Región Autónoma de Uygur de Xinjiang. En los últimos 50 años, esta tierra ubicada en el interior del continente europeo y asiático se ha integrado en la gran corriente económica tanto nacional como internacional. Su producción de algodón ha ocupado el primer puesto en todo el país en varios años consecutivos, y afecta las fluctuaciones en el precio del algodón mundial. Este año Xinjiang ha obtenido otra vez buena cosecha de algodón, y se espera mantener una magnitud de producción global de 1,75 millones de toneladas. En 1955, año en que se fundó la región autónoma, la producción algodonera de esta misma sólo llegó a 25.000 toneladas.

Aparte del algodón, Xinjiang también gana el primer lugar del país en la producción de la salsa de tomate, del lúpulo y del espliego, etc. Entre las cinco provincias y zonas del noroeste de China, Xinjiang produce y redistribuye la mayor cantidad de azúcar granulado y de cereales, respectivamente.

Algo comparable con la agricultura de oasis en Xinjiang es su industria moderna. Por el momento, Xinjinag posee múltiples sectores industriales, tales como el petrolero, el de petroquímica, el hullero, el eléctrico, el metalúrgico, el de maquinaria, el de materiales de construcción, el textil y el alimenticio, y cuenta con 5.798 fábricas bien equipadas tecnológicamente, así que se ha configurado un sistema industrial de variedades completas y alto rendimiento. En los desiertos de Gobi de los Valles de Tarim, de Junggar y de Tuha, se han fundado el tercer campo petrolífero y el segundo campo de gas natural del país, y en los barrancos de la montaña Tien Shan, la Kunlun y la Altai, se ha formado la sexta zona de producción de oro de China. La corriente de gas natural procedente del sur de Xinjiang, por el gasoducto de traslado de gas natural del oeste al este de más de 4.000 kilómetros, se transporta ininterrumpidamente a Shanghai y Beijing.

En el nuevo siglo, se ha acelerado el desarrollo del transporte de Xinjiang. En vísperas del 50 aniversario de la fundación de la región autónoma, dos autopistas más, cuya longitud totaliza 394 kilómetros, se abrieron al tránsito. Hasta finales del 2004, el recorrido de las carreteras de Xinjiang que se han abierto al tránsito alcanza más de 86.000 kilómetros, el de transporte de los ferrocarriles, 3.000 kilómetros, y el de transporte de las 96 líneas aéreas nacionles e internacionales ya abiertas, más de 110.000 kilómetros, lo cual hace de Xinjiang una zona con vías aéreas más largas y estaciones aéreas más numerosas en China.

La Ruta de la Seda que ha estado silenciosa durante más de 400 años se prospera otra vez. En el 2004, el volumen global de importación y exportación del comercio exterior de Xinjiang llegó a 5.636 millones de dólares, 244 veces más que en 1978.

En los primeros diez días de julio de este año, la región autónoma elaboró un plan estratégico consistente en acelerar la industrializazión de nuevo tipo de ella misma, planteando crear aquí grandes bases de energéticos, de petroquímica, de algodón, de silvicultura, de turismo, de metales no ferrosos y de procesamiento de productos agrícolas y sus derivados, las cuales resultarán incomparables para otras provincias y zonas. Se puede prever que la creación de estas siete bases industriales en Xinjiang impulsará su industrialización de nuevo tipo y atraerá los recursos humanos, de materiales, de fondos y de informaciones hacia el oeste del país, convirtiendo esta región autónoma en una zona económica poderosa del oeste de China.

(06/10/2005, CIIC)