China necesita adoptar medidas para salvaguardar los intereses de los empleados de las empresas de fondos extranjeros ante el aumento de las disputas colectivas laborales en los últimos años, señaló ayer un asesor político.
La inversión extranjera no debe ser atraída a costa de las condiciones de trabajo de los empleados chinos, y el gobierno debe coordinar las relaciones entre empleador y empleados, indicó Zhang Guoxiang en la actual sesión anual del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), el máximo órgano asesor del país.
Zhang citó un informe presentado por el comité de asuntos extranjeros de la CCPPCh, en el que se afirma que las prácticas irregulares en el empleo, los bajos salarios, el exceso de trabajo, el incumplimiento de la seguridad social y la escasez de medidas de seguridad en el trabajo son las principales causas de las disputas colectivas laborales.
El informe, basado en un sondeo de relaciones laborales en las provincias de Guangdong y Fujian, detalla que las organizaciones de arbitraje de disputas laborales en Guangdong trataron 17.000 casos en los que estaban implicadas empresas de fondos extranjeros en 2005, un aumento del 69 por ciento respeto al año anterior.
El Comité Nacional de la CCPPCh ha pedido la promulgación de una ley de contratación laboral lo antes posible y el establecimiento de un mecanismo para coordinar las relaciones laborales.
Los inversores extranjeros han establecido más de 570.000 empresas en China, empleando a 25 millones de personas hasta finales de 2005. Más de 480 compañías en la lista de Fortune Global 500 tienen presencia en China.
(13/03/2007, Agencia de Xinhua)
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