El país ha aumentado la inversión en agricultura, zonas rurales y agricultores para reducir la disparidad entre los residentes rurales y los urbanos, y ha estado aplicando la estrategia de desarrollo en el oeste de China para disminuir la brecha entre este y oeste, dijo Ma.
Además, este año se extenderá a todas las áreas rurales del país un sistema de pensiones de costo básico de la vida a gente de bajos ingresos para mejorar sus condiciones de vida y de trabajo, agregó Ma. Actualmente, el sistema sólo se aplica en 25 provincias, regiones autónomas y municipios.
El ingreso disponible per cápita de los residentes urbanos aumentó a 11.759 yuanes el año pasado, arriba de los 343 yuanes de 1978, y el ingreso neto per cápita de los residentes rurales creció de 134 yuanes a 3.587 yuanes, indicó Ma. Ambos se incrementaron en un índice anual de 6,7 por ciento durante los años después del ajuste por la inflación.
En otro asunto, Ma negó que China se convertirá en una amenaza para la seguridad energética mundial porque el país ha cubierto principalmente por sí mismo la demanda de energía desde 1978 y continuará haciéndolo en el futuro.
"China carece de petróleo y de gas natural, sin embargo, el consumo e importación de esta energía sigue estando a un nivel muy bajo", dijo Ma.
Un chino promedio consumió 242 kg de petróleo en 2005, mientras que el consumo mundial por persona se ubicó en 590 kg, en Japón llegó a 1,9 toneladas y en Estados Unidos a más de 3 toneladas, dijo Ma.
La importación de petróleo per cápita de China fue de 100 kg en 2005, mientras que la cantidad per cápita en el mundo fue de 400 kg, en Japón de cerca de 2 toneladas y en Estados Unidos de 2,1 toneladas, veinte veces el nivel de China, concluyó Ma.
|