Estimados diputados:
Por encargo del Consejo de Estado,
presentamos ante la IV Sesión de la X Asamblea Popular Nacional el
informe sobre la ejecución de los presupuestos central y
territoriales de 2005 y sobre los proyectos de los presupuestos
central y territoriales para 2006, con el propósito de que lo
examine y delibere y de que los honorables miembros del Comité
Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino
hagan sus observaciones al respecto.
I. EJECUCIÓN
DE LOS PRESUPUESTOS CENTRAL
Y
TERRITORIALES DE 2005
En 2005, bajo la firme dirección del
Comité Central del Partido y del Consejo de Estado, las diversas
administraciones territoriales y departamentos, teniendo la
concepción científica del desarrollo por mando, aplicaron a
conciencia las orientaciones y políticas de la dirección central y
las decisiones y resoluciones pertinentes de la III Sesión de la X
Asamblea Popular Nacional, de suerte que se lograron nuevos éxitos
en la construcción económica y el desarrollo de los servicios de
interés social y se mejoró en mayor medida la vida del pueblo. Los
departamentos fiscales, tributarios y aduaneros de distintas
instancias realizaron la gestión financiera estrictamente conforme
a la ley, reforzaron la supervisión y la administración financieras
e hicieron ingentes esfuerzos por aumentar los ingresos y reducir
los gastos; gracias a ello, los presupuestos central y
territoriales se cumplieron de modo satisfactorio.
Los ingresos fiscales de todo el
país alcanzaron nuevas cuotas, por encima de los 3 billones de
yuanes, situándose en 3 billones 162.798 millones (excluidos aquí y
en adelante los ingresos derivados de la deuda pública), es decir,
el 108,1% de lo presupuestado, lo que supone un incremento de
523.151 millones, el 19,8%, respecto al año 2004; los gastos
fiscales del país fueron de 3 billones 370.812 millones de yuanes,
es decir, el 104,5% de lo presupuestado, con un aumento de 522.123
millones, el 18,3%, frente al año precedente. El balance de
ingresos y gastos arrojó un déficit de 208.014 millones de
yuanes.
Examinemos ahora el nivel central y
el territorial por separado. Los ingresos globales de la hacienda
central sumaron 1 billón 724.979 millones de yuanes, es decir, el
106,4% de lo presupuestado, con un incremento sobre el año anterior
de 258.102 millones, el 17,6% (deducidos los 58.411 millones
correspondientes al aumento de las desgravaciones a la
exportación), según cálculos basados en los factores cotejables. De
esa cantidad, 1 billón 653.594 millones de yuanes correspondieron a
los ingresos propios de la hacienda central, o sea, el 108,5% de lo
presupuestado, con un incremento de 258.060 millones, el 18,5%,
respecto al año anterior. Los gastos totales de la hacienda central
fueron de 2 billones 24.941 millones de yuanes, el 105,4% de lo
presupuestado, cifra que supone un crecimiento de 238.887 millones,
el 13,4%, frente a 2004. Esa suma incluye 877.573 millones de
yuanes de gastos propios de la hacienda central, el 104% de lo
presupuestado, lo que significa un aumento de 88.165 millones, el
11,2%, respecto al año precedente, y 1 billón 147.368 millones de
yuanes como ingresos tributarios devueltos a las haciendas
territoriales y como subsidios a las mismas, lo que hace el 106,5%
de lo presupuestado, con un incremento de 150.722 millones, el
15,1%, en relación con 2004. El déficit de la hacienda central fue
de 299.962 millones de yuanes, 38 millones menos que el de 300.000
millones ratificado por la III Sesión de la X Asamblea Popular
Nacional, y representó el 1,6% del producto interno bruto (PIB). En
2005, el principal de las deudas internas y externas vencidas que
amortizó la hacienda central fue de 392.325 millones de yuanes;
para cubrir esta suma y el déficit fiscal del mismo año, la
hacienda central emitió bonos públicos por valor de 692.287
millones de yuanes. Además, emitió en nombre de los gobiernos
territoriales 10.000 millones de yuanes en tales bonos. Los
ingresos del fondo gubernamental central fueron de 139.910 millones
de yuanes, y los gastos por el mismo concepto, también de 139.910
millones. Los ingresos de las haciendas territoriales totalizaron 2
billones 656.572 millones de yuanes (incluidos los ingresos
tributarios devueltos por la hacienda central y los subsidios
concedidos por ella), es decir, el 107,2% de lo presupuestado, lo
que supone un aumento de 415.813 millones de yuanes, el 18,6%, en
relación con el año previo según cálculos basados en los factores
cotejables. De esta cantidad, 1 billón 509.204 millones de yuanes
correspondieron a los ingresos propios de las haciendas
territoriales, el 107,7% de lo presupuestado, con un incremento de
265.091 millones, el 21,3%, sobre el año precedente. Los gastos de
las haciendas territoriales sumaron 2 billones 564.624 millones de
yuanes, o sea, el 103,5% de lo presupuestado, lo que representa un
crecimiento de 434.000 millones, el 20,4%, respecto al año
anterior. Esa suma incluye 2 billones 493.239 millones de yuanes de
gastos propios de las haciendas territoriales, es decir, el 104,7%
de lo presupuestado, con un aumento de 433.958 millones, el 21,1%,
frente a 2004, y 71.385 millones entregados a la hacienda central,
cantidad más o menos igual a la del año previo. El balance de los
ingresos y gastos de las haciendas territoriales arrojó un saldo
positivo o transferencia de 91.948 millones de yuanes. Las cifras
de la ejecución presupuestaria arriba mencionadas podrán sufrir
algunos cambios menores cuando finalicen la elaboración y el
resumen del balance final.
La ejecución del presupuesto central
y el trabajo financiero de 2005 se sintetizan en los siguientes
puntos:
1. Se aplicó la política
fiscal prudente y se ejecutaron de modo satisfactorio los
presupuestos. A principios de 2005, conforme a las nuevas
circunstancias que enfrentaba en el desarrollo económico y social,
la dirección central reajustó oportunamente el rumbo de la política
fiscal y aplicó una prudente consistente principalmente en
“controlar el déficit, reajustar la estructura, impulsar la
reforma, aumentar los ingresos y disminuir los gastos”. Se planeó
situar el déficit presupuestario de la hacienda central en 300.000
millones de yuanes, lo que implicaba una reducción de 19.200
millones en relación a 2004; se disminuyó en 30.000 millones de
yuanes el volumen de los fondos para proyectos financiados con
deuda pública, y se aumentó en 10.000 millones de yuanes la
inversión destinada a la construcción corriente dentro del
presupuesto central. En el curso de la aplicación de la referida
política, se llevaron a cabo efectivamente las exigencias de las
“cinco coordinaciones”*, no solo haciendo hincapié en el uso de
múltiples medios políticos como la recaudación tributaria, la
concesión de subsidios y la transferencia de pagos, sino también
reajustando de manera apropiada la estructura de la utilización y
la colocación de los fondos para proyectos financiados con deuda
pública, lo cual permitió potenciar la agricultura y otros
eslabones débiles del desarrollo económico y social y garantizar
prioritariamente los fondos necesarios para los proyectos
importantes ya en marcha, la agricultura, la silvicultura, las
obras hidráulicas, la educación, la ciencia, la cultura, la
sanidad, la energía, etc.
Sobre la base del desarrollo estable
y relativamente acelerado de la economía, se fortalecieron la
recaudación y la administración de los ingresos con arreglo a la
ley, se aplicó con dinamismo la administración científica, se
revisaron y reglamentaron por completo las políticas tributarias
preferenciales y se logró controlar rigurosamente las exenciones
totales o parciales y recaudar todos los impuestos que debían ser
recaudados, de modo que se realizó un considerable crecimiento de
los ingresos fiscales del país. En 2005 estos ingresos se
incrementaron en 523.151 millones de yuanes, el 19,8%, frente al
año precedente.
* Se hace referencia a la
coordinación del desarrollo entre la ciudad y el campo, entre las
diversas regiones, entre la economía y la sociedad, entre el ser
humano y la naturaleza de forma armoniosa y entre la labor interna
y la apertura al exterior.
Cabe señalar que, además del
incremento estable y relativamente rápido de la economía nacional
como factor básico, el considerable crecimiento de los ingresos
fiscales del país se debe a factores no corrientes y originados por
el fortalecimiento de la recaudación y la administración por parte
de los departamentos tributarios. Los principales de estos factores
son los siguientes:
En primer lugar, por impacto del
aumento de la producción y la subida en gran margen de los precios
de los recursos energéticos básicos y materias primas y materiales
como carbón, petróleo crudo y metales ferrosos, así como por el
crecimiento relativamente rápido del sector inmobiliario, los
ingresos provenientes de estos sectores por impuestos al valor
agregado y a las transacciones y por otros impuestos sobrepasaron
en gran medida a los de otros sectores, siendo su valor incremental
excepcional de más de 60.000 millones de yuanes.
En segundo lugar, en 2005 los
ingresos derivados del impuesto sobre la renta empresarial de todo
el país se acrecentaron un 38,9%, cifra superior al 22,6% de
incremento registrado el mismo período en las ganancias de las
empresas industriales de escala superior a la requerida. Esto se
debió principalmente a que las ganancias empresariales habían
registrado en 2004 un considerable aumento, por lo que los ingresos
provenientes de la recaudación del impuesto sobre la renta
empresarial a través de la revisión y liquidación de cuentas se
incrementaron en 2005 en más de 50.000 millones de yuanes respecto
al año precedente. Esta cantidad incluía un aumento anual de más de
20.000 millones de yuanes entregados en concepto del impuesto sobre
la renta empresarial pagado por los tres grandes bancos comerciales
(el Banco de China, el Banco de la Construcción de China y el Banco
Industrial y Comercial de China), los cuales, en virtud de su
transformación realizada conforme al sistema accionarial, habían
logrado desprenderse de sus préstamos fallidos, elevar la calidad
de sus activos, reforzar su capacidad de obtención de ganancias y
acrecentar los saldos positivos en sus cuentas.
En tercer lugar, los departamentos
tributarios intensificaron la recaudación, la administración y la
inspección tributarias e hicieron grandes esfuerzos por revisar y
cobrar los impuestos no pagados,lo que contribuyó en forma
considerable al aumento de los ingresos.
Resumiendo los factores arriba
mencionados, de los ingresos aumentados en 2005, unos 120.000
millones de yuanes se lograron debido a los factores no corrientes.
Deducidos los ingresos de este tipo, el aumento de los ingresos
fiscales y tributarios del país se corresponde esencialmente con el
crecimiento económico y el nivel de los precios.
Los ingresos de la hacienda central
en 2005 sobrepasaron los presupuestados en 161.900 millones de
yuanes (sin deducir el índice de aumento de las desgravaciones a la
exportación). Conforme al espíritu de las instrucciones del Comité
Central del Partido y del Consejo de Estado acerca de la práctica
concienzuda de la concepción científica del desarrollo y a tenor de
lo que se exige en la Decisión del Comité Permanente de la Asamblea
Popular Nacional sobre el Fortalecimiento del Examen y Supervisión
del Presupuesto Central y en las resoluciones pertinentes de la III
Sesión de la X Asamblea Popular Nacional, la hacienda central
dedicó los sobreingresos principalmente a incrementar los gastos
para el fortalecimiento de los eslabones débiles del desarrollo
económico y social y a suplir los impagos legados del pasado,
además de aumentar, según lo estatuido por las leyes y reglamentos
pertinentes y el sistema fiscal, en 32.800 millones de yuanes los
fondos destinados al reintegro de ingresos tributarios y a la
transferencia de pagos de carácter ordinario a las haciendas
territoriales y a la transferencia de pagos a las zonas de minorías
étnicas. Hablando en concreto, se aumentaron en 24.400 millones de
yuanes los gastos de seguridad social (de esa cantidad, 19.400
millones de yuanes como pago al fondo nacional de seguridad social
y 5.000 millones como aumento de subsidios a empresas estatales en
cierre o quiebra); se acrecentaron en 2.600 millones de yuanes los
gastos destinados a la educación y la ciencia; se emplearon 58.400
millones en incrementar el índice de las desgravaciones a la
exportación en el mismo año y en dar los fondos necesarios para
suplir parte del impago de las desgravaciones en el ejercicio
anterior; se asignaron 9.000 millones de yuanes para liquidar las
cuentas no saldadas, según políticas establecidas, por las
cooperativas de compraventa como consecuencia de las pérdidas en su
gestión de algodón, y se dedicaron los 34.700 millones de yuanes
restantes a gastos reservados para la reforma del régimen salarial
de los funcionarios públicos y para las políticas complementarias
de esta reforma. El Consejo de Estado ya ha informado al Comité
Permanente de la Asamblea Popular Nacional de la programación de
los sobreingresos previstos de la hacienda central.
2. Se brindó enérgico apoyo
a la solución de los problemas de la agricultura, el campo y el
campesinado, y se impulsó el desarrollo coordinado entre las zonas
urbanas y las rurales. En 2005, al apoyar la agricultura,
el campo y el campesinado, la Hacienda continuó con su apoyo de
gran intensidad, políticas realistas y medidas enérgicas. En todo
el año, los fondos que solo la hacienda central asignó para este
objetivo alcanzaron 297.500 millones de yuanes, 34.900 millones o
un 13,3% más que la ejecución real de 2004.
Primero: Se
profundizó de continuo en la reforma tributaria y tarifaria rural.
Para tal efecto, la hacienda central destinó 66.200 millones de
yuanes como transferencia de pagos, un 26,3% más que el año
anterior. En 2005, se dejaron de recaudar por completo el impuesto
sobre la ganadería y los impuestos sobre los productos agrícolas
especiales a excepción de la hoja de tabaco, y ascendieron a 28 las
demarcaciones de nivel provincial donde se puso en práctica la
exención del impuesto sobre la agricultura, de lo cual se
beneficiaron 800 millones de campesinos.
Segundo: Se
aplicaron a conciencia la política de “triple subsidio”[1] y otras
pertinentes. En este sentido, 30 demarcaciones de nivel provincial
del país destinaron un total de 13.200 millones de yuanes como
subsidios directos a la producción cerealera, lo que significa un
incremento del 13,8% frente al año 2004. En cuanto al subsidio para
el cultivo de variedades mejoradas, se otorgaron 3.870 millones de
yuanes, un 35,8% más que el año precedente. La hacienda central
concedió 300 millones de yuanes del subsidio para la compra de
máquinas y aperos agrícolas, cifra que es más de 4 veces la del año
previo; además, pagó 5.500 millones de yuanes especiales para
brindar apoyo financiero a los distritos con una enorme producción
cerealícola, y eximió del impuesto al valor agregado sobre la urea
fabricada y comercializada y estimuló mediante políticas
arancelarias la importación de los medios de producción agrícola
carentes o escasos en el país, lo que permitió poner en juego el
entusiasmo de los gobiernos territoriales por dar importancia a la
agricultura y llevar a buen término la producción cerealera,
asegurando el suministro de cereales.
Tercero: Se brindó
apoyo a un desarrollo a largo plazo de la agricultura y el
campesinado. En 2005 la hacienda central asignó 81.278 millones de
yuanes como inversión en construcciones básicas dentro de lo
presupuestado y como fondo para proyectos financiados con deuda
pública, en ambos casos destinados a la agricultura y a la
construcción de infraestructuras rurales, de modo que lograron
mejorar en mayor medida las condiciones de vida y producción en el
campo. Asimismo, destinó 9.855 millones de yuanes a la explotación
agrícola integral y dedicó el 76,6% de los fondos aumentados a la
construcción de infraestructuras agrícolas para transformar las
tierras labrantías de rendimiento bajo y mediano de las principales
zonas cerealícolas. Al mismo tiempo, exploró y adoptó activamente
formas como inversión, participación en el capital social y
otorgamiento de préstamos con interés descontado para proyectos
especiales, poniendo en juego con mayor eficacia el papel
orientador, demostrador y activador de los fondos de explotación
agrícola integral. La hacienda central concedió 400 millones de
yuanes como fondo de subsidio, un 60% más que en 2004, en apoyo a
la capacitación de 2.800.000 campesinos para el desplazamiento de
la mano de obra rural; incrementó de continuo la inversión en la
ayuda a las zonas pobres mediante el desarrollo, que alcanzó 13.000
millones de yuanes en 2005, y asignó 25.170 millones de yuanes como
subsidio directo a los campesinos que habían devuelto sus tierras
de cultivo a bosques. Se siguió dando enérgico respaldo a la
popularización de la ciencia y la tecnología agrícolas, la
industrialización agrícola, el desarrollo de cooperativas
especializadas de los campesinos, la construcción de pequeñas obras
hidráulicas para tierras de cultivo y el análisis de suelos y la
aplicación proporcional de fertilizantes.
[1] Se refiere al subsidio directo a
los cultivadores de cereales, el subsidio a los campesinos de
algunas zonas para el cultivo de variedades mejorables y el
subsidio para su compra de grandes máquinas y aperos agrícolas.
3. Se incrementó en mayor
medida la inversión fiscal y se promovió el desarrollo de los
servicios de interés social.
Primero: Se apoyó
la labor relativa al empleo y el reempleo y a la seguridad social.
En 2005 los gastos fiscales del país en estas áreas totalizaron
364.927 millones de yuanes, lo que supone un incremento del 17,1%;
de esa suma, los gastos de la hacienda central en la seguridad
social fueron de 162.359 millones, un aumento del 10%. Se ayudó
activamente a las tres provincias del Nordeste en el desarrollo del
ensayo de perfeccionamiento del sistema de seguridad social urbano
y en la mejora del sistema de seguros de vejez básicos de los
trabajadores de las empresas, y se estudió y elaboró el plan para
ampliar el alcance del ensayo conducente a asegurar la
transferencia íntegra de las primas de dichos seguros a las cuentas
bancarias individuales. Se tomó parte activa en la elaboración de
diversas políticas financieras y tributarias preferenciales de la
dirección central para el empleo y el reempleo y se las aplicó a
conciencia. En la mayoría de las demarcaciones de nivel provincial
se cumplió básicamente la tarea de incorporar al seguro de
desempleo la garantía de manutención básica de los trabajadores
desplazados de las empresas estatales, de modo que se logró en lo
fundamental que la garantía del nivel de vida mínimo cubriera en
las ciudades a todos los que debían ser sus beneficiarios. Se
propició el debido cumplimiento de la labor de solventar las
dificultades económicas de los cuadros del ejército trasladados a
labores civiles en empresas y de los militares desmovilizados, y se
brindó enérgico apoyo a la lucha contra los desastres naturales y
el socorro a los damnificados; al mismo tiempo, se revisaron, con
supresión de aquellas consideradas irracionales, las tarifas
relativas al empleo de los trabajadores emigrados del campo, y se
adoptaron medidas activas encaminadas a aportar fondos que
requerían la administración y los servicios para dichos
trabajadores y la educación de sus hijos.
Segundo: Se prestó
apoyo a la aceleración del desarrollo de la ciencia, la educación y
la cultura. Los gastos para educación en todo el país en 2005
fueron de 395.159 millones de yuanes, lo que supone un incremento
del 17,4%, de los cuales 38.438 millones, un 15,9%, correspondieron
a la hacienda central; de esa suma, los gastos de educación propios
de esta alcanzaron 33.864 millones de yuanes, con un aumento del
17,2%, el cual superó el crecimiento de sus ingresos corrientes. La
hacienda central y las territoriales de diversas instancias
asignaron más de 7.000 millones de yuanes como fondo especial para
ampliar la esfera de aplicación de la política de “doble exención y
un subsidio”*, beneficiando a 34 millones de alumnos pertenecientes
a familias pobres de las regiones centrales y occidentales que se
hallaban en la etapa de escolarización obligatoria rural. La
hacienda central también dedicó 5.500 millones de yuanes al
continuo apoyo a la ejecución de obras de rehabilitación de
edificios de escuelas de primaria y secundaria en mal estado de
todo el país, el plan de “conquista de plazas fuertes” en la
generalización fundamental de la escolarización obligatoria de
nueve años y la alfabetización básica de jóvenes y adultos del
Oeste, el programa de educación a distancia por medios actualizados
en la enseñanza primaria y secundaria rural, y el reajuste de la
distribución geográfica de escuelas de primaria y secundaria
rurales. Asignó fondos especiales de 770 millones de yuanes para la
construcción de centros de experimentación y capacitación para la
educación profesional, con miras a respaldar en mayor grado su
reforma y desarrollo; 3.260 millones de yuanes para seguir apoyando
la ejecución del Programa 211, el Programa 985 y otros proyectos
prioritarios, y aumentar la capacidad de innovación científica y
tecnológica y de servicio social de los centros de enseñanza
superior, y 3.640 millones de yuanes para seguir apoyando la
profundización en la reforma de la estructura administrativa de los
mismos. Sobre todo a partir de 2005, la hacienda central comenzó a
designar anualmente 1.000 millones de yuanes como subvenciones y
becas estatales, intensificando en mayor medida la financiación a
estudiantes de centros docentes superiores con dificultades
económicas. Los gastos de todo el país para la ciencia y la
tecnología en ese año sumaron 99.156 millones de yuanes, es decir,
un aumento del 20,9%; de esa suma, la parte correspondiente a la
hacienda central alcanzó 60.078 millones, un incremento del 21,8%,
que fueron utilizados para apoyar prioritariamente proyectos como
la construcción de la plataforma estatal de condiciones básicas
para la ciencia y la tecnología y el ensayo del programa de
innovación intelectual de la Academia de Ciencias de China. Ese
mismo año, los gastos para la cultura, los deportes y la radio en
todo el país aumentaron un 18% y se situaron en 69.288 millones de
yuanes; de esa suma, la parte correspondiente a la hacienda central
fue de 9.927 millones, con un incremento del 17%, que fueron
dedicados para revigorizar el fomento de la cultura en los niveles
de base y seguir apoyando el programa nacional de codisfrute de
informaciones culturales, el de cobertura de radio y televisión en
todas las aldeas y el de donación de libros en zonas rurales. Se
asignaron también 250 millones de yuanes como fondo especial para
la protección de grandes restos arqueológicos y otros importantes
sitios de patrimonio cultural.
Tercero: Se
promovieron el fomento del sistema de asistencia médica y sanidad y
su innovación. En 2005, los gastos fiscales del país en la
asistencia médica y la sanidad, de 102.699 millones de yuanes,
crecieron en un 20,2%. La hacienda central programó 4.200 millones
de yuanes para apoyar la implantación y perfeccionamiento del
sistema de auxilio y tratamiento médico para emergencias de salud
pública, el de redes informáticas sobre enfermedades y el de
supervisión de la aplicación de la ley en materia sanitaria. Asignó
fondos de subsidio por valor de 542 millones de yuanes para
respaldar el ensayo del nuevo sistema de asistencia médica
cooperativa rural, de modo que su alcance se extendió del 11,6% de
los distritos, municipios o distritos urbanos del país en 2004 al
23,5% en 2005. Al mismo tiempo, se hizo progresar activamente la
implantación de un sistema de auxilio y asistencia médica en las
zonas urbanas y las rurales. Se asignaron 335 millones de yuanes,
un 68% más que en 2004, como fondo de premio y ayuda a las familias
campesinas que cumplían la política de planificación familiar. La
hacienda central creó, en especial, un fondo de 2.000 millones de
yuanes para la prevención y el control de la gripe aviar, y aplicó
por fases una política de exención total o parcial de impuestos,
garantizando con eficacia la cobertura de las necesidades de la
labor de prevención y control de la gripe aviar hiperpatógena y
promoviendo la recuperación y el desarrollo de la cría de aves de
corral.
Cuarto: Se
garantizó la construcción del poder político del Estado. En 2005 la
hacienda central asignó 4.810 millones de yuanes como fondo
especial para la seguridad pública, la fiscalía y la justicia,
mejorando eficazmente las condiciones de sus organismos de base
para la aplicación de la ley y la atención de casos, y elevando el
rendimiento del uso de los fondos a través del mejoramiento de los
métodos de su administración; designó especialmente 400 millones de
yuanes para continuar apoyando el fomento de la tramitación
aduanera eficaz, con lo cual se alcanzó de manera preliminar el
objetivo de “acelerar el ritmo, aliviar las cargas, elevar la
eficiencia y supervisar y administrar con rigor”, y destinó 924
millones de yuanes como fondo especial para seguir apoyando el
ensayo de la reforma del régimen carcelario en las provincias,
regiones autónomas o municipios bajo jurisdicción central
pertinentes. Se apoyó activamente la elaboración a nivel nacional,
territorial y departamental de proyectos de respuesta ante
emergencias públicas.
4. Se agilizó la
transferencia de pagos y se impulsó la equiparación de los
servicios públicos básicos. Al mismo tiempo de aplicar
concienzudamente las políticas financieras y tributarias
preferenciales relativas al desarrollo a gran escala de las
regiones occidentales y la revigorización del Nordeste y otros
antiguos centros industriales, se innovaron continuamente las
formas de ayuda y se potenció el apoyo al respecto.
Primero: Se
emprendió de manera dinámica la innovación del mecanismo encaminado
a aliviar las dificultades de las haciendas distritales y
cantonales. A partir de 2005, de acuerdo con los lineamientos
generales de “definición explícita de las responsabilidades,
saneamiento integral, aplicación tanto del estímulo como de la
restricción y orientación según sea cada caso”, la hacienda central
empezó a asignar 15.000 millones de yuanes para aplicar la medida
política de “triple premio y un subsidio”*. Esto ha permitido poner
en juego el entusiasmo de los gobiernos de las distintas instancias
territoriales por inclinar la colocación de sus recursos
financieros hacia niveles inferiores y por desarrollar la economía
de los distritos, simplificar sus organismos y reducir sus
plantillas y perfeccionar la estructura fiscal de nivel provincial
hacia abajo. Sobre la base del mantenimiento de la magnitud
original de la transferencia de pagos a las haciendas distritales y
cantonales para su libre disposición, las diversas provincias y
regiones autónomas aumentaron los fondos de premio y subsidio en
10.800 millones de yuanes, de modo que las haciendas distritales y
cantonales han logrado frenar la tendencia al recrudecimiento de
sus dificultades y han comenzado a desarrollarse hacia un rumbo
favorable.
Segundo: Se aumentó
en gran medida la transferencia de pagos. En 2005, además de los
414.371 millones de yuanes en concepto de devolución de ingresos
tributarios y de subvención regular, la hacienda central concedió,
mediante transferencia de pagos, 732.997 millones de yuanes como
subsidios de diversos tipos, lo que supone un aumento del 21,6%
sobre 2004. De esa suma, los fondos otorgados mediante
transferencia de pagos a las haciendas territoriales para su libre
disposición alcanzaron 381.272 millones, un 46,4% más que el año
precedente, y el porcentaje de los destinados a las regiones
centrales y occidentales sobrepasó el 90%. Todo esto no solo
impulsó la equiparación de los servicios públicos básicos, sino
también alivió eficazmente las dificultades de las haciendas
distritales y cantonales e impulsó el desarrollo coordinado entre
las diversas regiones.
5. Se profundizó en la
reforma fiscal y tributaria y se promovió el perfeccionamiento del
sistema de economía de mercado socialista.
Primero: Se
obtuvieron notables resultados en la reforma del sistema
tributario. Se perfeccionó aún más el proyecto de ensayo de la
reforma de sustitución del impuesto al valor agregado de tipo
productivo por otro de consumo, y se estudió y definió en términos
explícitos la política tributaria en materia de depreciación de los
activos fijos de las empresas industriales del Nordeste, acumulando
experiencias para la posterior extensión de dicha reforma en todos
los aspectos. Se estudió concienzudamente el proyecto de ajuste del
impuesto sobre la renta personal y se decidió elevar, a partir del
1 de enero de 2006, de 800 a 1.600 yuanes la suma mínima imponible
de los ingresos salariales mensuales para la recaudación de dicho
impuesto y, al mismo tiempo, ampliar el alcance de la declaración
por cuenta propia de los contribuyentes e intensificar la
recaudación y administración respecto de los individuos con
ingresos elevados, previa ratificación del Comité Permanente de la
Asamblea Popular Nacional. Se estudió y perfeccionó en mayor medida
el nuevo proyecto de Ley del Impuesto sobre la Renta Empresarial y
el proyecto de ajuste de la política sobre el impuesto al consumo.
Además, conforme a las nuevas circunstancias surgidas en el proceso
de reforma, se mejoró aún más el mecanismo de pago de
desgravaciones a la exportación. A partir del 1 de enero de 2005,
la hacienda central y las territoriales han venido cubriendo
conjuntamente, en una relación de 92,5 a 7,5, en lugar de la
anterior de 75 a 25, la cantidad que supera la cifra base de las
desgravaciones a la exportación realizadas por diversos
territorios, aligerando las cargas de sus haciendas y promoviendo
el desarrollo del comercio exterior.
Segundo: Se
desarrolló a fondo la reforma del sistema de administración
presupuestaria. Sobre la base del impulso integral de la reforma de
los presupuestos departamentales por parte de la hacienda central y
las territoriales, se promovió a pasos seguros en los departamentos
centrales el ensayo de la reforma de fijación de cuotas de gastos
en especie y se practicó una administración actualizada de los
presupuestos de proyectos, reforzando la unidad, la integridad y la
equidad de la elaboración de los presupuestos. Se fortaleció la
administración de fondos de saldo positivo de las asignaciones
fiscales, se promovió a pasos seguros el ensayo de evaluación de la
utilización de dichas asignaciones y se elevó la rentabilidad de
los fondos fiscales. Se intensificó la administración de los
ingresos no tributarios y se lograron nuevos avances en la reforma
de la administración de ingresos y gastos por dos vías separadas.
En 2005 se extendió a todos los departamentos centrales la reforma
a favor del sistema de pagos centralizados por el tesoro público,
incorporando a más de 3.300 entidades presupuestarias de base y sus
fondos fiscales de más de 370.000 millones de yuanes en el marco de
aplicación de esta reforma, y a todos los departamentos centrales
que tienen ingresos no tributarios en la esfera de la reforma del
sistema administrativo de cobro y entrega de ingresos, mientras se
efectuó la reforma a favor del sistema de cobros y pagos
centralizados por el tesoro público en 36 provincias, regiones
autónomas, municipios bajo jurisdicción central o municipios
contemplados individualmente en el plan estatal de su propio nivel,
así como en más de 200 municipios de nivel prefectoral y más de 500
distritos. Se alcanzaron notables éxitos en la reforma del sistema
de adquisiciones públicas en todo el país, y los gobiernos de nivel
central y provincial ya cumplieron la tarea de establecer por
separado organismos de administración de adquisiciones públicas y
de su operación y la labor de separar las funciones entre unos y
otros; la magnitud de estas adquisiciones en todo el país alcanzó
250.000 millones de yuanes, lo que supone un aumento de 36.400
millones en relación con 2004 y una tasa de ahorro de fondos del
11%. Con la aprobación de la Junta Presidencial del Comité
Permanente de la Asamblea Popular Nacional, a partir de 2006 se ha
comenzado a adoptar medidas para administrar el saldo de la deuda
pública, con el fin de aumentar la transparencia de la
administración de esta y evitar los riesgos fiscales. Se ha
empezado el ensayo simulado de la reforma para la clasificación de
los ingresos y gastos gubernamentales en 6 departamentos centrales
y 5 provincias o municipios, con resultados alentadores. El año
pasado se aceleró la formación del sistema informático de
administración financiera del gobierno y se intensificó el
desarrollo y aplicación del sistema de operaciones fiscales
esenciales, y se configuró de manera preliminar un sistema de redes
mediante el cual se vinculan en forma vertical las instancias
central, provincial y municipal (prefectoral) y en forma horizontal
los departamentos funcionales y entidades presupuestarias
correspondientes del mismo nivel, todo lo cual sentó cimientos
sólidos para lograr una administración fiscal informatizada.
Tercero: Se brindó
enérgico apoyo a la reforma de las empresas estatales y del sistema
financiero. En 2005, la hacienda central asignó 21.900 millones de
yuanes como fondos de apoyo a 116 empresas estatales en cierre o
quiebra según las políticas establecidas, lo que permitió recolocar
a 550.000 trabajadores. Se llevó adelante en forma expedita el
trabajo de separar la gestión de los servicios sociales de las
funciones del segundo grupo de 74 empresas centrales sometidas a
dicha actuación, se dio enérgico respaldo a las empresas estatales
en su reorganización y cambio de régimen y en la reforma para
convertir sus créditos impagables en acciones, y se promovió la
reforma de los sectores eléctrico, de telecomunicaciones,
ferroviario, de aviación civil y de servicios postales, todo lo
cual se acompañó de una serie de políticas tributarias
preferenciales encaminadas a ayudar a las empresas en estos
procesos. Se adoptaron medidas arancelarias para reajustar la
estructura de exportación de los productos textiles y neutralizar
las fricciones comerciales, con miras a ayudar a las empresas
textiles a aplicar la estrategia de “salir al exterior”. Se
respaldó enérgicamente la innovación y la reforma del sistema
bancario, apoyando con prioridad al Banco Industrial y Comercial de
China, el Banco de China, el de la Construcción y el de las
Comunicaciones en su reorganización financiera y en el cambio de
sus regímenes para la cotización en bolsa, se potenció el control
financiero de las cuatro importantes compañías de administración de
activos de instituciones financieras, y se elaboraron y pusieron en
práctica políticas tributarias preferenciales para el desarrollo de
los mercados de seguros, de valores y de capitales. La hacienda
central asignó 2.931 millones de yuanes como subsidio a los
intereses de los depósitos de ahorro en régimen de indexación, con
el fin de impulsar y apoyar a 29 provincias, regiones autónomas o
municipios bajo jurisdicción central a profundizar en la reforma de
las cooperativas de crédito rurales.
Cuarto: Se promovió
en forma dinámica la reforma del sistema de viviendas. Se mejoró
aún más el sistema de administración de fondos de reserva para la
construcción de viviendas y se emplearon activamente las políticas
tributarias para frenar la compraventa especulativa de viviendas,
lo que promovió la estabilidad básica de los precios de estas y el
desarrollo sano del sector inmobiliario.
6. Se impulsó con dinamismo
la gestión de las finanzas según la ley y se potenciaron la
supervisión y la administración fiscales. Por un lado, se
plasmaron en los diversos aspectos y eslabones del trabajo
financiero la gestión de las finanzas con arreglo a la ley, la
reglamentación de la administración, la supervisión rigurosa y el
desarrollo de finanzas en el marco legal, para fortalecer sin cesar
la supervisión de los propios departamentos de hacienda, y, por el
otro, se pusieron en práctica las resoluciones de la Asamblea
Popular Nacional y las opiniones de auditoría pertinentes, se
realizó un análisis y un estudio concienzudos sobre la situación y
se adoptaron medidas para el debido reordenamiento y
rectificación.
Primero: Se
perfeccionó de continuo el sistema de leyes y reglamentos
financieros. Así, se llevó a efecto con dinamismo el Programa de
Aplicación para la Promoción en Todos los Sentidos del Ejercicio de
la Administración con Arreglo a la Ley, promulgado por el Consejo
de Estado; se aplicó el Reglamento de Castigo y Sanción a las
Infracciones Fiscales, y se elaboraron las Propuestas de Aplicación
para la Promoción en Todos los Sentidos del Ejercicio de la
Administración y la Gestión Financiera con Arreglo a la Ley por
Parte de los Departamentos Fiscales. Además, se impulsó la
investigación, estudio, elaboración y modificación de las
principales leyes y reglamentos fiscales, tales como la Ley de
Presupuesto, la Ley de Transferencia de Pagos de la Hacienda, la
Ley Fundamental Tributaria y las Disposiciones para la Aplicación
de la Ley de Adquisiciones Públicas. En combinación con la puesta
en práctica de la Ley de Permiso Administrativo, se hizo una
revisión completa de los asuntos sujetos a examen y aprobación
administrativos de la Hacienda, que resultó en la supresión de
dicho examen y aprobación para un total de 39 proyectos y el ajuste
del mismo procedimiento para otros 6.
Segundo: Se
intensificó de continuo la labor básica de la contabilidad. Se
impulsaron activamente la convergencia de las normas de
contabilidad y de auditoría de China con las aplicadas en el plano
internacional y la formación de contables superiores, se potenció
la administración gremial y el fomento de la honestidad y
credibilidad de los contables públicos certificados, y se realizó
en forma unificada la inspección de la calidad del ejercicio
profesional de las oficinas contables y de información contable de
las empresas.
Tercero: Se reforzó
en forma ininterrumpida la supervisión fiscal. Se hizo énfasis en
la supervisión de los fondos clave que la sociedad seguía de cerca
y se impulsó con dinamismo la de la eficacia de su utilización, de
modo que se perfeccionó sin cesar el mecanismo de supervisión
fiscal y se elevó constantemente su eficiencia. En 2005 se
investigaron y trataron fondos dudosos por un valor de 60.600
millones de yuanes, se redujeron y se recuperaron, a través de la
verificación, 15.900 millones de fondos fiscales, y se recaudaron y
se entregaron a la hacienda central mediante la supervisión 26.600
millones de yuanes a modo de ingresos no tributarios.
Cuarto: Se reforzó
de continuo la labor de reordenamiento y rectificación. El Consejo
de Estado atribuyó suma importancia a las resoluciones pertinentes
de la Asamblea Popular Nacional y a las opiniones y problemas
planteados en el informe de auditoría, y exigió a los diversos
departamentos y las entidades pertinentes que se sometieran
conscientemente a la supervisión mediante la auditoría, pusieran en
práctica a conciencia las decisiones de auditoría y rectificaran
con firmeza los problemas existentes. En la actualidad, dichos
departamentos y entidades han efectuado en forma concienzuda el
reordenamiento y la rectificación correspondientes. Los problemas
en la ejecución del presupuesto central descubiertos en la
auditoría han sido, en su mayoría, rectificados y corregidos, y se
ha exigido responsabilidad a las personas involucradas. Hasta
finales de octubre de 2005, se habían entregado a la Hacienda 1.183
millones de yuanes de fondos de diversos tipos, se habían
perfeccionado 472 sistemas y reglamentos, y 121 personas habían
sido sancionadas conforme a la disciplina del Partido y la
administrativa. El Consejo de Estado ha presentado un informe sobre
el reordenamiento y la rectificación al Comité Permanente de la
Asamblea Popular Nacional.
El año 2005 fue el último del X Plan
Quinquenal. Al pasar revista al lustro pasado, somos testigo de
nuevos cambios registrados en la hacienda estatal, los cuales se
manifiestan principalmente en los siguientes aspectos:
Se engrosaron de continuo
los recursos fiscales del Estado. Los ingresos fiscales de
todo el país superaron sucesivamente los 2 billones, 2,5 billones y
3 billones de yuanes, alcanzando en el X Quinquenio los 11,5
billones, lo que supone un aumento de 6,4 billones, el 126,5%,
sobre el quinquenio anterior. De esa suma, la parte de ingresos
propios de la hacienda central aumentó un 141,5%, y la de las
haciendas territoriales, un 111,3%. Al terminar el quinquenio en
2005, la participación de los ingresos fiscales de todo el país en
el PIB fue del 17,3%, 3,8 puntos porcentuales más que el 13,5%
registrado en 2000, año de cierre del IX Quinquenio. Los gastos
fiscales del país fueron de 12,8 billones de yuanes, un aumento de
7,1 billones, el 124%, respecto al quinquenio precedente; de esa
cifra, la parte de gastos propios de la hacienda central aumentó en
un 109,5%, y la de las haciendas territoriales, en un 130,5%. El
incremento de los ingresos fiscales se logró con mayor estabilidad
y coordinación, mientras se dieron pasos más acelerados en el
desarrollo fiscal.
Siguió acentuándose el papel
de la regulación y el control macroeconómicos de la
Hacienda. Conforme a las necesidades objetivas del
desarrollo económico, se introdujeron ajustes oportunos para pasar
de la aplicación de la política fiscal activa a una prudente, lo
que promovió el desarrollo estable y relativamente rápido de la
economía. En base a un concienzudo resumen de las experiencias
obtenidas en la práctica de la política fiscal, se implementó y
perfeccionó un sistema de regulación y control macroeconómicos de
la Hacienda adaptado en lo esencial a diferentes condiciones en la
evolución de la economía como la inflación, la deflación y el
manteniendo del equilibrio fundamental en el volumen de la oferta y
la demanda pero con su estructura desequilibrada, y que abarca una
serie de elementos esenciales, tales como la fijación de objetivos,
la combinación de políticas, la elección de oportunidades y la
organización de la ejecución.
Se mejoró sin cesar el
sistema de gasto público basado en considerar al ser humano como lo
primordial. Conforme a la concepción científica del
desarrollo y la exigencia del desarrollo de la economía de mercado
socialista, se reajustó y optimizó con más energía la estructura de
los gastos, reduciendo y retirando gradualmente las inversiones de
la Hacienda destinadas a las áreas de competencia y explotación
ordinarias; se apoyó en forma enérgica la reforma y el desarrollo
de la escolarización obligatoria, el empleo, la seguridad social,
la salud pública y otros servicios sociales de beneficio público;
se prestó atención a la solución de las contradicciones y problemas
relevantes concernientes a los intereses vitales de las masas
populares, con preferencia a las zonas, sectores y grupos de
población con dificultades económicas, y se tomó la debida
realización, protección y desarrollo de los intereses fundamentales
de las más amplias masas populares como puntos de partida y de
apoyo a la hora de programar los gastos fiscales.
Se continuó profundizando en
la reforma del sistema de administración de la hacienda
pública. Se impulsaron activamente la reforma del
mecanismo de desgravaciones a la exportación, el cambio del
impuesto al valor agregado de tipo productivo por otro de consumo,
y la reforma para la distribución compartida de los ingresos
provenientes del impuesto sobre la renta personal y del impuesto
sobre la renta; se profundizó en la reforma del sistema de
administración presupuestaria, y se apoyó la reforma de la
estructura económica en otros terrenos. Se promovió el fomento de
la legalidad en el ámbito financiero, se potenció la labor básica
de la contabilidad y se cambió la forma de supervisión financiera,
con lo cual se perfeccionó aún más el marco de administración de la
hacienda pública.
* Se refiere a la política de eximir
de los gastos de libros de texto y otros gastos escolares a alumnos
de familias pobres rurales en la etapa de escolarización
obligatoria y conceder subsidios de manutención a los alumnos
internos.
* Por esta política se entiende
premiar a los gobiernos distritales con dificultades fiscales que
aumenten sus ingresos tributarios y a los de nivel provincial y
municipal que incrementen la transferencia de pagos a las haciendas
distritales con dificultades para su libre disposición; a los
gobiernos de nivel distrital y cantonal que simpliquen sus
organismos y recorten sus plantillas, y a los distritos
cerealícolas importantes, y conceder subsidios a las
administraciones territoriales que hayan cumplido de manera
satisfactoria en el pasado la labor de aliviar las dificultades de
las haciendas distritales y cantonales.
Junto a todo lo anterior, somos
conscientes de que en las operaciones de las finanzas y la
ejecución presupuestaria todavía subsisten no pocos problemas a los
que urge una solución.
Primero: A medida
que el desarrollo económico y social de nuestro país entra en una
nueva etapa, aún se requiere aumentar la capacidad de garantía
fiscal para promover el desarrollo económico y social integral,
coordinado y sostenible. Por ejemplo, es necesario incrementar la
inversión en la agricultura, el campo y el campesinado, en la
escolarización obligatoria, en la salud pública, en la protección
ambiental y en otros eslabones débiles del desarrollo económico y
social.
Segundo: Todavía es
imperativo apoyar con más vigor el aumento de la capacidad de
innovación autónoma, el aliento al progreso científico y
tecnológico y el cambio de la modalidad de crecimiento
económico.
Tercero: Se impone
acelerar el paso en la búsqueda de una equiparación de los
servicios públicos. Las haciendas de base de algunas zonas siguen
con una situación difícil, y la garantía fiscal para los órganos de
poder de base y su capacidad de servicio público están por
reforzarse.
Cuarto: Subsisten
bastantes deudas abiertas y ocultas en otros terrenos que afectan
al funcionamiento de la economía, lo que hace muy ardua la tarea de
prevenir y neutralizar los riesgos fiscales.
Quinto: Es preciso
continuar profundizando en la reforma de los sistemas
presupuestario y de administración fiscal y haciendo esta más
reglamentada, científica y transparente. El Consejo de Estado
presta suma atención a estas contradicciones y problemas y exige al
Ministerio de Hacienda y a los departamentos pertinentes tomar
medidas efectivas para solucionarlos. Con mayor conciencia de lo
trascendental y perentorio de la misión que nos incumbe, estamos
dispuestos a acelerar el paso en la estructuración de la hacienda
pública, perfeccionar el mecanismo de toma científica de
decisiones, profundizar con empeño en la reforma, optimizar la
estructura de los gastos fiscales y elevar de continuo la capacidad
de administración y el nivel de servicio de la Hacienda.
II. PROYECTOS
DE LOS PRESUPUESTOS CENTRAL Y TERRITORIALES PARA
2006
De acuerdo con la disposición y la
exigencia de la dirección central para el trabajo económico y
conforme a la nueva situación que se afronta en la labor fiscal,
los lineamientos generales respecto de la programación del
presupuesto y dicha labor para 2006 son como sigue:
Bajo la guía de la teoría de Deng
Xiaoping y el importante pensamiento de la “triple
representatividad”*, aplicar concienzudamente el espíritu del XVI
Congreso Nacional del Partido, de las III, IV y V sesiones
plenarias de su XVI Comité Central, y de la Conferencia Central
sobre el Trabajo Económico, y, teniendo la concepción científica
del desarrollo por mando, trabajaremos para seguir aplicando la
política fiscal prudente y hacer ímprobos esfuerzos por aumentar
los ingresos y reducir los gastos, optimizar la estructura de los
gastos y garantizar efectivamente los gastos prioritarios;
profundizar con empeño en la reforma, impulsar la reestructuración
económica y el cambio de la modalidad de crecimiento económico, y
promover el desarrollo sostenible, acelerado, armonioso y sano de
la economía y el progreso en todos los sentidos de la sociedad, con
el fin de dar un buen comienzo al cumplimiento sin contratiempos de
los objetivos fijados en el XI Plan Quinquenal.
Según los lineamientos generales
arriba citados, los principales índices del presupuesto programados
para 2006 son los siguientes:
Los ingresos de la hacienda central
totalizarán 1 billón 927.204 millones de yuanes, lo que supone un
aumento de 202.225 millones, el 11,7%, en comparación con 2005. Esa
cantidad incluye 1 billón 852.030 millones de yuanes de los
ingresos propios de la hacienda central, que se incrementan en
198.436 millones, el 12%. En cuanto a los gastos, sumarán 2
billones 222.204 millones de yuanes, con un incremento de 197.263
millones, el 9,7%, frente al año precedente. Esa cifra comprende
952.500 millones de yuanes de los gastos propios de la hacienda
central, un aumento de 74.927 millones, el 8,5%, y 1 billón 269.704
millones pagados como ingresos tributarios devueltos a las
haciendas territoriales y como subsidios concedidos a las mismas,
con un incremento de 122.336 millones, el 10,7%. El balance
esperado de los ingresos y gastos de la hacienda central arroja un
déficit de 295.000 millones de yuanes, lo que representa una
disminución de 5.000 millones respecto a lo presupuestado para
2005, y se prevé que la participación del déficit en el PIB seguirá
reduciéndose hasta el 1,5%. Para 2006, la hacienda central dedicará
60.000 millones de yuanes a proyectos financiados con deuda
pública, 20.000 millones menos que el año anterior (de los que
10.000 millones corresponden a los bonos públicos que va a dejar de
emitir en nombre de los gobiernos territoriales). Además, aumentará
en 10.000 millones de yuanes la inversión destinada a la
construcción corriente dentro del presupuesto central. El saldo de
las deudas públicas de la hacienda central será de 3 billones
556.800 millones, esto es, 295.400 millones más que el año anterior
según el mismo método de cálculo. Resumiendo los ingresos y gastos
fiscales centrales y territoriales programados, los ingresos
fiscales de todo el país para 2006 ascenderán a 3 billones 542.338
millones de yuanes, con un incremento de 379.540 millones, el 12%,
y los gastos totales alcanzarán 3 billones 837.338 millones de
yuanes, aumentando 466.536 millones, el 13,8%.
*Es decir, el Partido Comunista de
China debe representar siempre lo que se exige para el desarrollo
de las fuerzas productivas avanzadas de China, el rumbo por el que
ha de marchar su cultura avanzada, así como los intereses
fundamentales de sus masas populares más amplias.
|
Al programar un aumento del 12% en
los ingresos fiscales de todo el país para 2006, tenemos en cuenta
tanto los índices macroeconómicos previstos por la dirección
central como los diversos factores de disminución de los ingresos,
entre ellos la abolición del impuesto sobre la agricultura en todo
el país, el impulso al experimento de sustituir el impuesto sobre
el valor agregado productivo por otro de consumo, el continuo
reajuste de la tasa de aranceles aduaneros, el aumento de la suma
mínima imponible de los ingresos salariales mensuales para el cobro
del impuesto sobre la renta personal y otros cambios políticos, así
como la disposición de sumas suficientes para las desgravaciones a
la exportación y la posible baja de rentabilidad en ciertas ramas y
empresas. Esta es una programación activa y prudente.
De acuerdo con el principio de
actuar con una visión de conjunto, ajustar los gastos a los
ingresos y asegurar los gastos prioritarios, y la exigencia de
aplicar la política fiscal prudente, en la programación de los
gastos para 2006 la hacienda central pone énfasis en el reajuste
estructural de estos, asegurando unos y acortando otros, es decir,
asegurar los gastos necesarios para los servicios públicos y
acortar los ordinarios, con preferencia a la agricultura, la
educación, el empleo, la seguridad social, la salud pública y otros
eslabones débiles en el desarrollo económico y social, a las zonas
y los grupos de personas con dificultades económicas, y a la
innovación científica y tecnológica y el cambio de la modalidad de
crecimiento económico.
1. Se acrecentarán la
regulación y el control macroeconómicos en el terreno fiscal y se
promoverá el desarrollo acelerado y sano de la economía.
De acuerdo con el espíritu de la Conferencia Central sobre el
Trabajo Económico y las exigencias objetivas del desarrollo
económico, en 2006 debemos mantener la continuidad y la estabilidad
de la política macroeconómica, seguir aplicando la política fiscal
prudente e impulsar con empeño el desenvolvimiento sano de la
inversión, el consumo y la exportación.
Primero: Reajuste y
optimización de la estructura de las inversiones del gobierno. Este
año el volumen total de la inversión destinada a la construcción
básica dentro del presupuesto central será de 115.400 millones de
yuanes, suma en la que se recogen los 60.000 millones en fondos
destinados a los proyectos financiados con bonos públicos y los
55.400 millones de inversiones dentro de lo presupuestado. Este
volumen se corresponde con el registrado en 2005. Además, se
reajustará y optimizará en mayor medida la estructura de
utilización de dichos fondos e inversiones, poniendo en juego el
papel de las inversiones del gobierno en la aplicación de las
“cinco coordinaciones”*, en el fortalecimiento de los eslabones
débiles y en la promoción del desarrollo armonioso, y apoyando con
preferencia el desarrollo rural, la ciencia, la educación, la
cultura, la sanidad, el ahorro de recursos, la protección del
entorno ecológico, el desarrollo a gran escala del Oeste del país y
los proyectos prioritarios que atañen a una ejecución expedita del
XI Plan Quinquenal.
Segundo:
Rectificación y normalización del orden en la distribución de
ingresos. Se efectuará oportunamente la reforma del régimen
salarial de los funcionarios públicos en función de sus cargos y
rangos, con el fin de establecer un régimen salarial unificado a
nivel estatal que combine ambas condiciones. Se revisarán y
rectificarán las subvenciones fijas y los subsidios, a fin de crear
un sistema normalizado y ordenado de concesión de los mismos y un
mecanismo de supervisión y restricción al respecto. Se promoverá la
reforma del sistema de distribución de ingresos personales en las
instituciones públicas y se perfeccionará el régimen de
subvenciones fijas a los que trabajan en zonas apartadas o de
condiciones duras, con objeto de impulsar la equidad en la
distribución de ingresos y poner en juego la función catalizadora
del consumo para la economía.
Tercero:
Consolidación y desarrollo de los logros de la reforma a favor del
mecanismo de pago de las desgravaciones a la exportación. En 2006
la hacienda central designará 426.400 millones de yuanes a dichas
desgravaciones, con miras a garantizar los fondos necesarios para
hacerlo puntual e íntegramente a las empresas de exportación. Las
haciendas territoriales, sobre todo las de nivel provincial,
también deben hacerlo de acuerdo con lo reglamentado. Además, se
hará valer en mayor medida el papel de la política arancelaria y
otras políticas tributarias, se apoyará e impulsará el sistema de
agencias de comercio exterior y se cambiará la modalidad de
desarrollo de este, a fin de promover su sano desarrollo.
2. Se aumentará sin descanso
el apoyo en materia de políticas y la inversión de fondos y
acelerar la construcción de un nuevo agro socialista. La
construcción de un nuevo agro socialista, grandioso objetivo
planteado por la V Sesión Plenaria del XVI Comité Central del
Partido, no solo favorece el desarrollo de la agricultura y el
campo y el enriquecimiento del campesinado, sino también atañe al
mantenimiento de un orden y una paz duraderos en el país y a la
materialización de la gran revitalización de la nación china. Hay
que ir ampliando la cobertura de asignación de la hacienda pública
en el campo y establecer y perfeccionar el mecanismo de incremento
estable de los fondos de apoyo a la agricultura. En 2006 se va a
seguir manteniendo la continuidad y la estabilidad de la política
consistente en destinar principalmente a las zonas rurales los
gastos aumentados en educación, cultura y sanidad; incrementar la
inversión al respecto, poniendo énfasis en conceder más beneficios
y flexibilizar el control, y orientar y hacer valer el entusiasmo
de los diversos sectores sociales por aumentar su inversión en la
agricultura, el campo y el campesinado. Según la programación del
presupuesto de la hacienda central, los gastos asignados a la
agricultura, el campo y el campesinado en todo el año alcanzarán
339.700 millones de yuanes, lo que supone un incremento de 42.200
millones, el 14,2%, en comparación con el resultado del ejercicio
real de 2005. Este incremento, superior al de los ingresos globales
y de los gastos totales de la hacienda central, representa el 21,4%
del crecimiento de estos últimos.
Primero: Abolición
completa de los impuestos sobre la agricultura en todo el país. Los
impuestos agrícolas que subsistieron durante más de 2.600 años han
pasado al “museo de la historia”. Gracias a la reforma tributaria y
tarifaria rural, se ha reducido en unos 125.000 millones de yuanes
anuales la carga económica para los 800 millones de campesinos. En
2006 se estudiará y formulará con iniciativa un plan de sustitución
del impuesto sobre la hoja de tabaco como producto especial, se
efectuará la reforma tributaria y tarifaria en las granjas
estatales y se promoverá en todos los terrenos la reforma integral
en el campo. A tal efecto, la hacienda central va a asignar cada
año 78.200 millones de yuanes para la transferencia de pagos, y las
haciendas territoriales también asignarán gastos
correspondientes.
Segundo:
Perfeccionamiento y reforzamiento de la política de “triple
subsidio”. Vamos a incrementar los subsidios directos a los
cultivadores de cereales destinando 12.500 millones de yuanes como
fondos de este tipo a las 13 principales provincias o regiones
autónomas cerealícolas, con un aumento de 1.000 millones frente al
año 2005, de modo que los subsidios a cada una de estas provincias
o regiones autónomas ocupen el 50% del volumen global de sus
respectivos fondos de riesgo para la producción cerealera. La
hacienda central asignará 4.070 millones de yuanes como subsidios
al cultivo de variedades mejoradas, un incremento de 200 millones
respecto a 2005, y 600 millones de yuanes en subsidios a la compra
de máquinas y aperos agrícolas, el doble del año precedente, y
también ampliará la cobertura de los subsidios y reajustará las
prioridades de los mismos. Se estudiará y explorará con dinamismo
la implementación de un sistema de subsidio integral a los
campesinos para aumentar rendimiento del cultivo de grano.
Tercero: Ampliación
del ensayo del nuevo tipo de asistencia médica cooperativa rural.
Se va a extender dicho ensayo al 40% de los distritos, municipios o
distritos urbanos de todo el país; como el monto de subvención
tanto de la hacienda central como de las territoriales se elevará
de 10 a 20 yuanes por cada participante, la hacienda central hará
una asignación correspondiente de 4.730 millones de yuanes, más de
ocho veces la de 2005. Se va a potenciar la labor de auxilio y
asistencia médica en las zonas rurales, aliviando la situación de
las personas que viven en condiciones extremas por haber caído o
recaído en la pobreza a causa de enfermedades.
Cuarto: Apoyo
activo al desarrollo de la capacidad productiva integral de la
agricultura. Se va a invertir más en la construcción de
infraestructuras agrícolas y rurales, la mejora del entorno
ecológico, el progreso de la ciencia y la tecnología agrícolas, la
explotación agrícola integral y la ayuda a las zonas pobres
mediante el desarrollo, con el fin de promover el desarrollo de la
agricultura moderna. Al mismo tiempo, se coordinarán aún más los
fondos de apoyo a la agricultura para elevar la rentabilidad de su
utilización.
3. Se concentrarán los
esfuerzos en establecer un mecanismo de garantía de asignaciones
para la escolarización obligatoria rural y eximir totalmente de los
gastos de matrícula y gastos varios a los alumnos de escuelas de
primaria y secundaria rurales de las regiones
occidentales. El fortalecimiento de la escolarización
obligatoria rural constituye una tarea estratégica que atañe a la
situación global del desarrollo económico y social, y una medida de
suma importancia para alcanzar las metas estratégicas del XI Plan
Quinquenal y la edificación integral de una sociedad modestamente
acomodada. De 2006 a 2010, de acuerdo con el principio de “definir
con claridad las responsabilidades de las diversas instancias,
compartir entre la hacienda central y las territoriales las
asignaciones fiscales, aumentar la inversión fiscal, elevar el
nivel de garantía financiera y organizar por fases la ejecución”,
se incluirá de forma gradual y global la escolarización obligatoria
rural en la cobertura de la garantía de la hacienda pública y se
implantará un mecanismo de garantía según el cual la hacienda
central y las territoriales comparten las asignaciones
correspondientes por conceptos determinados y en proporciones
establecidas. La reforma tiene como contenido principal los
siguientes aspectos: eximir de los gastos de matrícula y gastos
varios a los alumnos en la etapa de escolarización obligatoria
rural, y facilitar libros de texto gratuitos a los alumnos
provenientes de familias pobres y conceder subsidios de manutención
a los alumnos internos; elevar el nivel de garantía de fondos
públicos para las escuelas de primaria y secundaria rurales;
establecer un mecanismo de efecto duradero para el mantenimiento y
rehabilitación de los edificios de estas escuelas, y consolidar y
perfeccionar en mayor medida el vigente mecanismo de garantía de
pago salarial de los maestros. Paralelamente, se va a crear en
todos sus aspectos un sistema de elaboración presupuestaria para
dichas escuelas e impulsar con agilidad la reforma integral
educacional. Para asegurar una ejecución expedita de la reforma, la
hacienda central asumirá la principal responsabilidad por la
inversión en la reforma del mecanismo de garantía de asignaciones
para la escolarización obligatoria rural del Centro y el Oeste, y
prestará asimismo apoyo a las zonas en situación difícil del Este.
Dicha reforma, programada para ser culminada en dos años y
perfeccionada en tres, se llevará a cabo, año por año y región por
región. En 2006 se promoverá integralmente la reforma del mecanismo
de garantía de asignaciones para la escolarización obligatoria
rural en las 12 provincias, regiones autónomas o municipios bajo
jurisdicción central del Oeste, y se iniciará y aplicará a escala
nacional el mecanismo de mantenimiento y rehabilitación de
edificios de escuelas de primaria y secundaria en las zonas
rurales. En 2007 se emprenderá por completo la escolarización
obligatoria gratuita en las zonas rurales del país. Se prevé que de
2006 a 2010 los fondos fiscales aumentados para la escolarización
obligatoria rural lleguen a un monto acumulado de 218.200 millones
de yuanes, sin considerar el factor de ajuste de salarios de los
maestros. Se va a prestar ayuda enérgica a la formación
profesional, intensificando el apoyo a la construcción de centros
de experimentación y capacitación para dicha formación, y mejorando
en mayor grado la política de financiación a los estudiantes de los
centros docentes profesionales que se encuentran en apuros
económicos. Por esta razón, la hacienda central va a asignar 740
millones de yuanes a la construcción de dichos centros de
experimentación y capacitación, y 800 millones como subvenciones de
estudio y becas para la formación profesional, con un aumento de
770 millones respecto a 2005 sumando ambas cifras. Al mismo tiempo,
se va a respaldar aún más la mejora de la calidad de la educación
superior.
4. Se esforzará por apoyar
el trabajo del empleo y el reempleo y de la seguridad social,
impulsando la creación de una sociedad armoniosa. La
intensificación de este trabajo constituye una medida importante
para proteger los intereses de las masas, impulsar la equidad
social y edificar una sociedad socialista armoniosa. En 2006, la
hacienda central destinará 185.982 millones de yuanes como
subsidios a la seguridad social y fondos para el empleo y reempleo,
lo que supone un aumento de 23.623 millones, el 14,5%.
Primero:
Continuación de la labor de empleo y reempleo. Se pondrán en
práctica nuevas políticas de apoyo a esta labor y se solucionarán
de forma adecuada los problemas que desde hace tiempo vienen
afectando a los trabajadores desplazados de las empresas
estatales.
Segundo:
Perfeccionamiento del sistema de seguros de vejez básicos de los
trabajadores de las empresas. Se va a realizar el ensayo de
asegurar la transferencia íntegra de las primas de seguros de vejez
básicos a las cuentas bancarias individuales, y a estudiar y
elaborar un proyecto de reforma del sistema de seguros de vejez de
las instituciones públicas.
Tercero: Aplicación
de la reforma salarial de los funcionarios públicos según sus
cargos y rangos y mejora correspondiente del trato a una parte de
la población necesitada.
Cuarto: Ayuda
concienzuda a las personas que se encuentran en dificultades
económicas para resolver los problemas relativos a su subsistencia
básica. Se acelerarán el desarrollo de los servicios sanitarios
comunitarios de las ciudades y el fomento del sistema de auxilio y
asistencia médica en las zonas urbanas y rurales, para poder ir
solucionando el problema del difícil y costoso acceso a la
asistencia médica de las masas; se promoverá el desarrollo del
sistema de asistencia social y se consolidarán aún más los éxitos
logrados en la cobertura fundamental del sistema de garantía del
nivel de vida mínimo a todos los que deben ser beneficiados en las
ciudades, y se estudiará a fondo y resolverá el problema
relacionado con la seguridad social de los campesinos cuyas tierras
han sido expropiados. Se prestará apoyo a la implementación del
sistema de igualdad de empleo entre la población urbana y la rural
y se estudiará sin demora y resolverá en forma gradual el problema
relativo a la seguridad social de los trabajadores emigrados del
campo, incluyéndolos a todos, conforme a la ley, en la cobertura
del seguro de accidentes laborales, y explorando métodos adaptados
a sus circunstancias particulares en cuanto a la garantía de
asistencia médica para enfermedades de importancia y la garantía de
vejez. Es menester ensayar activamente la implantación de un
sistema de garantía del nivel de vida mínimo para la población en
las zonas rurales que reúnan las condiciones requeridas, continuar
llevando a buen término el trato preferencial a los militares
minusválidos y a los familiares de los integrantes del ejército y
de los mártires, la colocación de los militares desmovilizados y la
superación de las dificultades de los cuadros del ejército
trasladados a labores civiles, y respaldar enérgicamente la
seguridad en la producción y la lucha contra los desastres
naturales y el socorro a los damnificados.
Quinto: Pleno apoyo
a la prevención y control de la gripe aviar hiperpatógena. Se va a
aumentar en mayor medida la inversión para respaldar el fomento del
sistema de salud pública y elevar la capacidad de prevención y
control de enfermedades graves. Junto con garantizar los fondos
necesarios para dicha prevención y control y la construcción de
infraestructuras correspondientes, se adoptarán eficaces medidas y
políticas financieras y tributarias para apoyar el desarrollo de la
avicultura, y se estudiará y apoyará el establecimiento de un
sistema de salud pública caracterizado por la coordinación de la
prevención y tratamiento de enfermedades de seres humanos, ganado y
aves de corral y por la integración de las zonas urbanas y las
rurales.
5. Se empeñará en impulsar
la innovación autónoma y el cambio de la modalidad de crecimiento
económico. Aumentar la capacidad de innovación autónoma
constituye la clave para elevar el nivel científico y tecnológico y
la competitividad de China en áreas esenciales, el eslabón central
para reajustar la estructura sectorial de la economía y cambiar la
modalidad de crecimiento económico, y también el camino a seguir
para promover el crecimiento continuo, estable y relativamente
rápido de la economía y lograr su desarrollo sostenible.
Primero: Incremento
en gran medida de la inversión fiscal en ciencia y tecnología. A
tenor de lo que se exige en el Programa Nacional de Desarrollo
Científico y Tecnológico a Medio y Largo Plazo (2006-2020) y el
plan de desarrollo científico y tecnológico durante el XI
Quinquenio, en 2006 la hacienda central va a asignar 71.604
millones de yuanes para la ciencia y la tecnología, un aumento de
11.526 millones, el 19,2%, frente a 2005, y de forma
correspondiente las haciendas territoriales también van a
incrementar sus inversiones al respecto. Esta política inspirará
mejor a toda la sociedad a estimar en lo más alto la innovación
científica y tecnológica y a incrementar la inversión en este
terreno. Es preciso potenciar el apoyo a la investigación básica y
de tecnologías de vanguardia y para beneficio público, así como a
las condiciones básicas para la ciencia y la tecnología y la
generalización de estas. Hay que determinar de forma racional los
porcentajes de las asignaciones para el funcionamiento normal de
las instituciones o centros de investigación científica, para sus
proyectos de investigación y para las condiciones básicas de esta,
dando un apoyo estable y continuo a las instituciones que se
dedican a la investigación básica o para beneficio público. Se
mejorará con eficacia la administración de los fondos, se elevará
la rentabilidad del uso de los fondos destinados a la ciencia y la
tecnología y se creará paulatinamente un sistema de evaluación del
rendimiento de la utilización de los fondos fiscales en este
terreno.
Segundo: Pleno
despliegue del papel catalizador de las políticas tributarias para
el progreso científico y tecnológico. Se aprovecharán a plenitud
las medidas de apoyo tributario para estimular y guiar a las
empresas a incrementar su inversión en ciencia y tecnología y
desarrollar tecnologías clave dotadas de derechos de propiedad
intelectual chinos. Se estudiarán y elaborarán políticas
tributarias de apoyo a las actividades de innovación tecnológica de
las empresas y de aliento al desarrollo de las sociedades de
capital de riesgo. Se mejorarán las políticas tributarias sobre
importaciones y exportaciones, estimulando la importación de
productos energéticos y de recursos naturales, técnicas y equipos
avanzados y piezas de repuesto y accesorios, y restringiendo la
exportación de productos cuya manufactura consume alta cantidad de
energía o causa grave contaminación, así como productos de recursos
naturales. Al aplicar políticas tributarias preferenciales sobre
importaciones, hay que cuidarse de ir trasladando el trato
preferencial de la importación de equipos completos hacia la de
importantes materias primas y materiales y piezas de repuesto y
accesorios clave que necesiten las empresas nacionales para
desarrollar productos y equipos con derechos de propiedad
intelectual chinos.
Tercero:
Perfeccionamiento de los regímenes financiero y de distribución de
ganancias de las empresas. Es imprescindible acelerar la reforma
del régimen financiero empresarial e implantar un régimen de
administración financiera que concuerde con el sistema empresarial
moderno y favorezca la innovación autónoma de las empresas. Se debe
reformar y mejorar el procedimiento de distribución de ganancia de
las empresas, permitiéndoles aplicar políticas de estímulo como la
concesión de derechos accionariales a los principales científicos y
técnicos que hayan hecho contribuciones sobresalientes, y
alentándoles a introducir a científicos y técnicos cualificados.
Hay que ampliar la función de apoyo de la política de adquisiciones
públicas y respaldar la fabricación de importantes equipos y
productos nacionales de nuevas tecnologías punta con derechos de
propiedad intelectual chinos.
Cuarto: Elaboración
y aplicación de políticas financieras y tributarias de apoyo al
desarrollo de la economía circular. Se promoverá la racionalización
de precios de los recursos y se establecerá un mecanismo de su
fijación que refleje de forma razonable la escasez de los mismos.
Se aplicará gradualmente el sistema de obtención compensada de
regalías por la prospección y explotación minera y se impulsarán la
utilización racional y la explotación integral de los recursos
minerales. Se va a acrecentar en forma paulatina el apoyo a la
producción limpia y al desarrollo de los recursos renovables y
nuevas energías, y se coordinarán los fondos para ultilizarlos
prioritariamente en el apoyo a la investigación y el desarrollo en
ciencia y tecnología, la divulgación de técnicas y la realización
de importantes proyectos de demostración, todo ello en relación con
el desarrollo de la economía circular. Se emplearán las medidas
políticas financieras y tributarias pertinentes para orientar la
conformación de modos de producción y consumo que favorezcan el
ahorro de recursos y la reducción de contaminación. Hay que apoyar
sin desmayo la implantación y el perfeccionamiento del mecanismo
político de mejora del entorno ecológico y protección
medioambiental. Con arreglo al principio de que “quien contamina,
paga” y tomando en plena consideración la escasez de recursos y el
coste de la protección medioambiental, se aumentarán en forma
gradual los cobros por la emisión de contaminantes y se incluirán
los factores medioambientales esenciales en el coste de la
producción. Según el principio de que “quien explota, protege;
quien utiliza, compensa”, se implementará y mejorará paso a paso el
mecanismo de compensación por daños causados al entorno ecológico
de nuestro país; se promoverá la mercantilización del tratamiento
de la contaminación, empezando por el impulso a la
industrialización del tratamiento de aguas residuales y basuras
urbanas, y se aumentará la inversión de fondos en proyectos de
demostración de prevención y control de la contaminación,
mejoramiento del entorno ecológico y protección medioambiental, así
como en el fomento de la capacidad de supervisión y administración
al respecto.
6. Se potenciará con
diligencia la transferencia de pagos en promoción del desarrollo
coordinado entre las regiones. Alcanzar la equiparación de
los servicios públicos básicos y promover el desarrollo coordinado
entre las diversas regiones constituye la meta de la hacienda
pública y, con mayor razón, la exigencia de crear una sociedad
armoniosa.
Primero: Más apoyo
financiero a las zonas subdesarrolladas, con el fin de acelerar el
desarrollo de las antiguas bases revolucionarias, las áreas
habitadas por minorías étnicas, las zonas fronterizas y las
regiones pobres. En 2006, los fondos de la hacienda central para la
transferencia de pagos de carácter ordinario a las haciendas
territoriales, en particular las de las regiones centrales y
occidentales, totalizarán 135.900 millones de yuanes, lo que supone
un incremento de 23.800 millones, el 21,2%, respecto a 2005, y los
fondos para la transferencia de pagos destinados a las zonas de
minorías étnicas sumarán 20.000 millones de yuanes, un aumento de
4.077 millones, el 25,6%.
Segundo: Más
inversión en la ayuda a las zonas pobres mediante el desarrollo. En
2006 la hacienda central asignará para tal fin fondos de 13.700
millones de yuanes, 700 millones más que el año precedente. Estos
fondos irán destinados prioritariamente a la construcción de
infraestructuras rurales en las aldeas pobres para mejorar de las
condiciones de producción y vida de la población indigente; al
desarrollo de la industrialización agrícola en las zonas pobres
encaminada principalmente a mejorar las formas organizativas de la
producción agrícola, aumentar la capacidad productiva de las masas
pobres e incrementar sus ingresos, y a la capacitación de la mano
de obra pobre rural para su desplazamiento.
Tercero: Aplicación
concienzuda de las diversas políticas y medidas financieras y
tributarias de la estrategia general de desarrollo regional. Se
dará prioridad a la aplicación de las políticas financieras y
tributarias preferenciales para el desarrollo a gran escala de las
regiones occidentales y para la revigorización del Nordeste y otros
antiguos centros industriales. Se estudiarán y elaborarán de manera
dinámica políticas financieras y tributarias tendentes a propiciar
el ascenso de las regiones centrales, y se apoyará a las regiones
orientales a desarrollarse primero.
7. Se apoyará con empeño la
reforma y perfeccionar el sistema de economía de mercado
socialista. La reforma es la fuerza motriz del desarrollo,
y también la garantía esencial para alcanzar un desarrollo
científico.
Primero: Apoyo
enérgico a la reforma de las empresas estatales. La hacienda
central dedicará 33.800 millones de yuanes para seguir llevando
adelante los trabajos relativos al cierre o la declaración en
quiebra de empresas estatales en aplicación de las políticas
establecidas y la separación de las funciones de las empresas
subordinadas a departamentos centrales de la gestión de los
servicios sociales. Se organizará la realización en el Nordeste del
experimento de solución del problema relativo a establecimientos de
propiedad colectiva adscritos a las empresas estatales.
Segundo: Respaldo
al progreso de la reforma del sistema financiero. Se estudiará de
forma prioritaria la reforma del sistema de administración de los
activos financieros estatales y se promoverá el establecimiento de
mecanismos de autorestricción y de desarrollo sostenible de los
bancos de orientación política. Se apoyará a la profundización en
la reforma del sistema financiero rural y se reforzará su función
de servicio.
Tercero: Mejoras
ulteriores en el sistema de recaudación tributaria. Se va a aplicar
cuanto antes y a escala nacional el proyecto de reforma de
incorporación del importe tributario que se cobra a las nuevas
máquinas y equipos de las empresas a la cobertura de deducción del
impuesto al valor agregado. Además, se pondrá en marcha el proyecto
de reajuste de la suma mínima imponible de los ingresos salariales
mensuales para el recaudo del impuesto sobre la renta personal,
implantar en tiempo oportuno la reforma del impuesto sobre el
consumo, recaudándolo a parte de los productos de recursos
naturales y bienes de consumo de elevada categoría. Se llevará
adelante con dinamismo en algunas zonas el ensayo de evaluaciones
tributarias simuladas para crear el impuesto sobre la
administración inmobiliaria y se promoverán activamente las
reformas relativas al impuesto sobre los recursos, el impuesto a la
utilización de vehículos y barcos y el impuesto sobre la ocupación
de tierras de cultivo. Se propulsará activamente la reforma de
unificar la tasa del impuesto sobre la renta de las empresas de
capital nacional y la de las de inversión externa. Se seguirá
brindando enérgico apoyo a la reforma e innovación estructural de
la distribución de cereales, las instituciones públicas, el
comercio exterior, los servicios de correos y la vivienda.
8. Se reforzará con empeño
la garantía fiscal y consolidar la construcción del poder
político. Con el fin de afianzar y ampliar los logros
obtenidos en el alivio de las dificultades de las haciendas a nivel
distrital y cantonal y continuar perfeccionando la política de
“triple premio y un subsidio”, en 2006 la hacienda central va a
asignar 21.000 millones de yuanes como fondos de premio y subsidio,
6.000 millones más que el año anterior. Al mismo tiempo, se
estudiarán activamente la asunción de responsabilidad por los
gastos de parte de los gobiernos de distintas instancias y la
delimitación autárquica de ingresos entre ellos, y se perfeccionará
con énfasis el sistema de administración fiscal de nivel provincial
hacia abajo. Por otra parte, se designarán 5.930 millones de yuanes
(un aumento de 1.120 millones, el 23,3%, en comparación con el año
2005) como gastos especiales para los organismos de seguridad
pública, fiscalía, tribunales y otros órganos judiciales en las
zonas pobres, con miras a reforzar la construcción de dichos
organismos en los niveles de base; 280.729 millones (un incremento
de 36.025 millones, el 14,7%) como gastos de defensa nacional para
incrementar la capacidad de nuestro ejército de efectuar
operaciones defensivas bajo las condiciones de altas tecnologías y
de enfrentarse a contingencias, salvaguardar la soberanía nacional
y la integridad territorial y mejorar en forma adecuada el trato
para con los militares, y 8.500 millones de yuanes (1.030 millones,
el 13,8%, más que el año anterior) como ayuda al extranjero para
intensificar los intercambios y la cooperación internacionales. La
hacienda central asignará como fondo de reserva 15.000 millones de
yuanes (5.000 millones más que en 2005) para elevar la capacidad
del Estado de garantizar la respuesta a emergencias, en tanto que
las territoriales harán también aumentos correspondientes en este
sentido. Además, la hacienda central va a hacer esfuerzos por
garantizar otros gastos prioritarios necesarios para la aplicación
de la concepción científica del desarrollo y para el servicio a la
situación general de la reforma, el desarrollo y la
estabilidad.
III. TRABAJAR
SÓLIDAMENTE PARA ASEGURAR UN CUMPLIMIENTO STISFACTORIO DEL
PRESUPUESTO DE 2006
De acuerdo con la exigencia general
planteada para la labor gubernamental de 2006, nos centramos en
cumplir cabalmente las siguientes tareas financieras:
1. Recaudar y administrar
con absoluta dedicación los ingresos tributarios y no tributarios
en aras del crecimiento estable de los ingresos fiscales.
Sobre la base de brindar enérgico apoyo al desarrollo económico y
agrandar la “tarta” de la economía, es preciso intensificar la
recaudación y administración de ingresos conforme a la ley,
cobrando todos los que deben ser cobrados y cerrando los resquicios
tributarios; controlar con rigor la exención total o parcial de
impuesto, revisar con empeño aquellas políticas tributarias
preferenciales cuyos plazos de aplicación hayan vencido y frenar y
rectificar resueltamente la implantación arbitraria de políticas de
exención total o parcial camuflada como la de “recaudar los
impuestos y devolverlos después”; rectificar y reglamentar con
energía el orden en la recaudación tributaria y golpear duramente
toda clase de infracciones, tales como la evasión y el fraude en el
pago de impuesto. Se debe fortalecer la administración de los
ingresos no tributarios y continuar explotando a fondo el potencial
de aumento de los mismos. Para su administración debemos estudiar y
elaborar métodos reglamentados, y ampliar en mayor medida el
alcance de esta administración mediante la incorporación gradual de
los ingresos del usufructo retribuido de activos estatales, los
réditos de la gestión del capital estatal, los ingresos
provenientes de la gestión con permiso especial, así como los
ingresos por concepto de multas, decomisos y donaciones. Hay que
endurecer aún más la administración de ingresos y gastos por dos
vías separadas y, en especial, llevar a buen término los trabajos
de saneamiento específico encaminado a reducir las cargas y
corregir las exacciones en materia de la educación, el campesinado
y las empresas. Se impone potenciar la supervisión y administración
dinámica de los ingresos, elevar de continuo la calidad de análisis
al respecto y llenar las diversas lagunas, con miras a asegurar un
incremento estable de los ingresos fiscales, alcanzar gradualmente
una programación coordinada de los ingresos tributarios y no
tributarios y aumentar la capacidad de regulación y control
financieros de los gobiernos de diversas instancias. Debemos
elaborar y aplicar como es debido el XI plan quinquenal de
desarrollo fiscal, explorar con dinamismo medidas y métodos de
tratamiento eficaz de las deudas de las instancias cantonal y
aldeana y prevenir y neutralizar los riesgos financieros,
promoviendo de esta manera un desarrollo fiscal sostenible.
2. Cubrir las necesidades de
ejecución de las “cinco coordinaciones” y combatir con firmeza la
ostentación y el despilfarro. En los últimos años no para
de aumentar el volumen global de la economía y han crecido con
rapidez los ingresos fiscales; sin embargo, aún debemos mantener
despejada la mente y agudizar nuestra conciencia sobre posibles
problemas latentes. China aún se encuentra en la etapa primaria del
socialismo, y necesitamos del apoyo y aseguramiento financiero para
mantener la estabilidad, impulsar el desarrollo, sustentar la
reforma y llevar a cabo las “cinco coordinaciones”, por lo que es
muy grande la presión que ejerce la necesidad de aumentar los
gastos, y no debemos en absoluto gastar dinero sin restricciones
tan solo por estar a la vista de una situación de ingresos fiscales
relativamente favorable. Hemos de asegurar estrictamente según lo
presupuestado los gastos prioritarios necesarios para la reforma
del mecanismo de garantización de los gastos en la escolarización
obligatoria rural, la ampliación del alcance de la reforma
experimental para el nuevo sistema de asistencia médica cooperativa
rural y la promoción de la innovación científica y tecnológica. No
solo la hacienda central va a garantizar en sumas suficientes los
fondos necesarios, las haciendas territoriales, a su vez, también
deberán programarlos de la misma manera, sin permitir en modo
alguno que surjan carencias de fondos. Al mismo tiempo, tenemos que
aplicarnos efectivamente la exigencia de seguir siendo modestos,
prudentes y libres de arrogancia y de precipitación en el estilo de
trabajo y perseverar en el estilo de vida sencilla y lucha dura,
para administrar con rigor los gastos y dedicarnos en cuerpo y alma
a la práctica de laboriosidad y ahorro, reduciendo los gastos en
reuniones, recepciones y uso de coches para actividades oficiales,
adoptando medidas efectivas para controlar la realización de foros,
festivales y conferencias internacionales poco prácticos, poniendo
coto de manera decidida a las “obras de autobombo” o proyectos a
modo de exhibición de méritos administrativos y luchando contra la
construcción a ciegas y la duplicación de obras. Debemos impulsar
el trabajo de evaluación de los resultados de los gastos, frenar
firmemente los actos de ostentación, despilfarro y dilapidación de
fondos y hacer más reglamentado, seguro y eficaz el uso de los
fondos fiscales, con miras a promover la edificación de una
sociedad ahorrativa.
3. Aplicar nuevos rubros de
ingresos y gastos gubernamentales y profundizar aún más en la
reforma del sistema de administración presupuestaria. La
reforma de clasificación de los rubros de ingresos y gastos
gubernamentales supone una innovación del sistema de administración
presupuestaria y reviste un importante significado para aumentar la
transparencia de los presupuestos del gobierno, fortalecer la
administración y supervisión presupuestarias, corregir la
corrupción en su origen y promover el fomento de la política
democrática socialista. Debemos recapitular a conciencia la
experiencia adquirida en 2005 en el ensayo simulado de la reforma
de clasificación de los rubros de ingresos y gastos
gubernamentales, perfeccionar los métodos correspondientes,
establecer de manera gradual un sistema de clasificación científica
y reglamentada de dichos ingresos y gastos y empezar a usar
oficialmente los nuevos rubros para la elaboración de los
presupuestos gubernamentales de 2007. Profundizaremos en la reforma
de los presupuestos departamentales y del sistema de administración
de la Hacienda y el tesoro público. En los niveles tanto central
como provincial, el alcance de la reforma de implantación del
sistema de pago centralizado por el erario se extenderá a todas las
entidades presupuestarias de base, recogiendo gradualmente todos
sus fondos fiscales en la cobertura de la reforma, la cual se
llevará a cabo también en el nivel prefectoral o municipal y se
impulsará al mismo tiempo a nivel distrital. Es menester promover
con energía la integración horizontal en red de los departamentos
de hacienda, los tributarios y el erario, y la reforma del sistema
de administración de cobros y entregas de los ingresos no
tributarios, y establecer y perfeccionar el mecanismo de
supervisión y administración de cobros y entregas de ingresos. Es
necesario reglamentar la administración de las adquisiciones
públicas, hacer valer la función de la política al respecto y
fortalecer la coordinación y cooperación internacionales en materia
de esta política, procurando que el volumen de dichas adquisiciones
supere los 300.000 millones de yuanes. Se promoverá la puesta en
práctica de la administración del saldo de deudas públicas y se
implantará un sistema de gestión científica y flexible de estas. Se
impone reforzar activamente el fomento del sistema informático de
administración financiera y perfeccionar el sistema de redes y de
seguridad en la administración de informaciones financieras. Es
indispensable intensificar de manera efectiva la gestión de activos
estatales de los organismos administrativos e instituciones
públicas, mejorar los reglamentos y estatutos relativos a dicha
gestión y emprender en todos los sentidos el inventario de los
activos de aquellos organismos e instituciones y la verificación de
sus fondos. Es preciso estudiar en forma dinámica los problemas
relacionados con el establecimiento de un régimen presupuestario
para la gestión del capital estatal.
4. Dedicar ingentes
esfuerzos a la gestión de las finanzas con arreglo a la ley e
intensificar la supervisión y administración fiscal y la labor
básica de la contabilidad. Es indispensable aplicar a
conciencia el Programa de Aplicación para la Promoción en Todos los
Sentidos del Ejercicio de la Administración con Arreglo a la Ley,
promulgado por el Consejo de Estado, promover con dinamismo el
proceso legislativo de enmienda de la Ley de Presupuesto y la Ley
del Impuesto sobre la Renta Empresarial y mejorar aún más el
sistema jurídico fiscal. Se debe, conforme a las disposiciones
unificadas del Comité Central del Partido y del Consejo de Estado,
impulsar activamente la labor de información pública sobre los
asuntos administrativos, elaborar y poner en marcha métodos
concretos para su ejecución y aceptar de forma consciente la
supervisión por parte de la sociedad. Es menester establecer y
perfeccionar el mecanismo de supervisión fiscal y plasmar esta en
los diversos eslabones de la operación financiera, y lograr
supervisar y controlar el proceso completo, o sea, antes, durante y
después, de la operación de los fondos fiscales, con miras a hacer
valer plenamente el papel activo de la supervisión fiscal en el
impulso del perfeccionamiento del sistema de economía de mercado,
la rectificación y reglamentación del orden de la economía de
mercado, la aplicación de la política macroeconómica financiera, y
la elevación de la rentabilidad de los fondos fiscales. Hay que
elaborar y promulgar nuevas normas de contabilidad y auditoría,
para crear así un sistema adaptado a las exigencias del desarrollo
de la economía de mercado socialista y que esté en consonancia con
el aplicado en el plano internacional. Es imprescindible fomentar
la honestidad, la credibilidad y la educación en la ética
profesional, perfeccionar el sistema de control interno y la
cultura empresarial de las oficinas contables y llevar a buen
término la administración y el desarrollo del sector de contables y
tasadores públicos certificados, con el fin de aplicar
estrictamente la supervisión y la administración gremiales, elevar
la calidad de las informaciones de este sector y reforzar su
credibilidad social. Al intensificar la innovación en el sistema
administrativo fiscal, debemos aceptar de forma consciente la
supervisión de la Asamblea Popular Nacional y de los departamentos
de auditoría y, con mayor conciencia de lo trascendental y
perentorio de la misión que nos incumbe, aumentar el sentido de
responsabilidad por la gestión financiera al servicio del pueblo,
reforzar la supervisión y administración de la utilización de los
fondos fiscales, mejorar el mecanismo de control interno, impulsar
de continuo la reglamentación de la administración fiscal y
prevenir toda clase de infracciones de las leyes y los reglamentos
financieros y económicos.
El año 2006 inicia el XI Plan
Quinquenal, por lo que cumplir en forma satisfactoria el
presupuesto y las diversas tareas fiscales de este año reviste un
significado trascendental. Bajo la dirección del Comité Central del
Partido con el camarada Hu Jintao como Secretario General,
enarbolando la gran bandera de la teoría de Deng Xiaoping y del
importante pensamiento de la “triple representatividad”, teniendo
firmemente enraizada en la mente la concepción científica del
desarrollo y aplicándola a conciencia, y de acuerdo con exigencias
que formule la IV Sesión de la X Asamblea Popular Nacional sobre el
trabajo económico y financiero, debemos someternos de forma
consciente a la supervisión y orientación de la Asamblea Popular
Nacional en la labor financiera, escuchar atentamente las opiniones
y sugerencias de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo
Chino, cambiar de manera efectiva nuestro estilo de trabajo,
desplegar a fondo la investigación y el estudio y esforzarnos por
servir a la situación general, agrandar la “tarta” económica y
financiera, persistir en considerar al ser humano como lo
primordial, emprender nuevas rutas e innovaciones y prestar
servicio con iniciativa, con el fin de hacer contribuciones
positivas a la promoción del desarrollo sostenible, acelerado,
armonioso y sano de la economía nacional y de la materialización
sin contratiempos de los objetivos establecidos en el XI Plan
Quinquenal.
* Coordinación del desarrollo entre
la ciudad y el campo, entre las diversas regiones, entre lo
económico y lo social, entre el ser humano y la naturaleza, y entre
la labor interna y la apertura al exterior.
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