El primer ministro chino, Wen Jiabao, prometió hoy, domingo, que China no busca ahora, ni buscará en el futuro, la hegemonía, aunque se vuelva una nación más poderosa. China tiene una historia de 5.000 años de gloriosos éxitos y humillantes sufrimientos, y su ascensión ha sido un sueño de varias generaciones de chinos, indicó Wen en una conferencia de prensa celebrada en esta capital tras la clausura de la II sesión de la Asamblea Popular Nacional, la máxima legislatura del país. China aprovechará la ventaja de la paz mundial para desarrollarse y al mismo tiempo para salvaguardar la paz mundial con su desarrollo, aseguró. El jefe de Gobierno subrayó que la ascensión de China se basará en su propia fuerza y su autoconfianza, así como en su inmenso mercado interno, y sus abundantes recursos humanos y naturales. Tras declarar que la ascensión de China no se puede lograr sin el resto del mundo, Wen indicó que su país siempre mantendrá su política de apertura y desarrollará los intercambios económicos y comerciales con todos los países amigos sobre la base de la igualdad y el beneficio mutuo. La ascensión de China, que necesitará un tiempo y probablemente los esfuerzos de varias generaciones, no seguirá la vía de otro país, ni amenazará a ningún otro país, ni se logrará a costa de otro país, afirmó Wen. (14/03/2004) |