Respuesta: Aunque la situación de los recursos de agua de China no es tan grave como describen estos reportajes, la realidad no nos permite optimismo de ningún modo. De hecho, la situación básica se caracteriza por una población numerosa frente a una escasa cantidad de agua, la distribución no pareja de los recursos hídricos en tiempo y espacio y la no conjugación de los recursos de agua y tierra con la distribución del desarrollo social y económico. En los más de 50 años desde la fundación de la Nueva China, mientras contamos con tan sólo el 6% del total mundial de recursos de agua, hemos alimentado al 20% de la población mundial y asegurado el desarrollo económico y social sostenible de nuestro país, el mayor en vías de desarrollo en el mundo. Sin embargo, debido al modo de crecimiento económico extensivo durante largo tiempo se ha agravado aún más la contradicción entre la oferta y la demanda de agua. En años normales, más de 400 de las 600 y tantas ciudades del país tienen sed en distinto grado, con una falta de agua aproximada a 40.000 millones de metros cúbicos, en tanto que la escasez de agua por la sequía ha devenido un problema agudo para el desarrollo económico en las zonas norteñas. Por otro lado, mientras crecen con rapidez la economía y la sociedad y siguen retrasadas las instalaciones de las empresas y ciudades para el procesamiento de aguas servidas, una enorme cantidad de residuos líquidos sin tratar y directamente descargados en los ríos, lagos y mares han contaminado a éstos y ha empeorado así el estado de escasez de recursos hídricos.

El agua es un recurso natural y económico a la vez. La contradicción exacerbada entre la oferta y la demanda de agua, su grave contaminación y el ambiente hídrico bajo amenaza han llegado a ser una seria restricción contra el desarrollo económico y social sostenible de China. Por ende, tratamos de darle solución en los cinco años entrantes a tener de los requisitos de edificar una sociedad ahorradora de recursos y amigable con el medio ambiente.

Primero, impulsar con esfuerzo la edificación de una sociedad ahorradora de agua. Se la ensayará en más de 100 ciudades, se formarán un mecanismo de ahorro de agua principalmente por medios económicos y un modo de ahorro de agua mediante el desarrollo autodisciplinado, y se elevarán sin cesar la eficiencia y la rentabilidad del uso de agua, a fin de promover el desarrollo coordinado entre la economía, los recursos y el medio ambiente. En el 2010, según lo previsto, se bajará el uso de agua por unidad del valor agregado industrial en 30%, se elevará el coeficiente de uso eficiente de la irrigación de 0,45 en la actualidad a 0,5 en todo el país, y se realizará el incremento cero del volumen total de uso de agua para la irrigación sobre la base del aumento de 10 millones de hectáreas irrigadas nuevas.

Segundo, intensificar aún más la prevención y tratamiento de la contaminación del agua, fortalecer por ley la supervisión y control de las bocas de descarga en los ríos, y prevenir y tratar la contaminación usando medios económicos. En el 2010 la tasa de tratamiento de las aguas servidas urbanas subirá del 45% en la actualidad a más del 60%, la calidad del agua de las áreas funcionales de los principales ríos y lagos cumplirá con las normas en más del 65%, la calidad del agua subterránea, que es el principal recurso hídrico de suministro en las ciudades, alcanzará las normas en 95%, y se habrá puesto a coto en lo básico el empeoramiento del sistema ecológico del agua.

Tercero, acelerar la asignación de recursos hídricos y mejorar el control de éstos en tiempo y espacio. Para aliviar la escasez de agua y el empeoramiento ecológico en el norte del país, se está planeando y construyendo el proyecto de trasvase de agua del sur al norte. Al mismo tiempo, se emprenderán otros proyectos de asignación de recursos hídricos, a fin de corregir la seria disparidad de la distribución de los recursos de agua entre las regiones. En el 2010, según lo previsto, se habrá aumentado una nueva capacidad de suministro de agua en alrededor de 40.000 millones de metros cúbicos por año, para colmar en lo básico la demanda de agua a favor del desarrollo económico y social del país.

Cuarto, impulsar activamente la reforma del sistema y mecanismo de administración de recursos hídricos, y mejorar de continuo este sistema mediante la integración de las cuencas fluviales y las regiones. En el 2010, según lo planeado, se terminará la asignación de cantidades de agua de los ríos principales, se decidirán los límites tope de cantidad de agua utilizable para las provincias localizadas en las cuencas fluviales, se definirán los derechos y obligaciones de estas provincias para el uso de agua, y se establecerán en lo preliminar el sistema del derecho de agua del Estado, el sistema de fundamentalización de los recursos hídricos para proyectos de construcción y el sistema de permiso de toma de agua.

Y quinto, perfeccionar el sistema de zonas de protección dedicadas a los lugares de origen de agua potable y elevar la capacidad de dar respuesta a incidentes de contaminación inopinados. Ahora se está elaborando el Plan General de Seguridad de Agua Potable Rural. En el 2010, según el plan, se resolverá el problema de esta seguridad para 80 millones de residentes en el campo, y en el 2015 la población con inseguridad de agua potable disminuirá en 50%.

China es un país de civilización antigua, pero también un país en vías de desarrollo que avanza hacia la modernización. Ya sea en el pasado o en el presente, su civilización y desarrollo están íntimamente vinculados con el servicio hidráulico. Nuestros antepasados construyeron muchas obras hidráulicas y éstas tuvieron un papel significativo en el desarrollo económico y social y algunas siguen dando rentabilidad y beneficiándonos. Hoy día, sin embargo, China se enfrenta con muchos problemas en el uso sostenible de los recursos de agua. Pero hay razón suficiente para confiar en que actuando conforme a lo que se exige del desarrollo sostenible y equilibrando la oferta y la demanda de agua sobre la base de mantener un buen sistema ecológico, seremos capaces de lograr construir una sociedad ahorradora de agua acompañada de una vida modestamente acomodada en el 2020.