IV. Protección medioambiental en las ciudades



La tasa urbanística de China se ha elevado del 29,04 por ciento de 1995 al 41,76 por ciento de 2004. Con respecto a los problemas ambientales surgidos en el acelerado desarrollo urbanístico, el Gobierno chino ha tomado una serie de medidas coordinadas, de modo que el ambiente de las ciudades mejore paulatinamente. De hecho se informa de progresos en ese aspecto en varias ciudades. En comparación con 1996, en 2005, el porcentaje de ciudades donde la calidad del aire alcanzó las normas de segunda categoría aumentó en 31 puntos porcentuales, y el de ciudades donde la calidad del aire fue inferior a las normas de la tercera categoría disminuyó en 39 puntos porcentuales.

Partiendo de la capacidad ambiental urbana y la garantía de los recursos, muchas ciudades de China han elaborado y ejecutado la programación general urbana y planes de materialización de las normas en todos los aspectos de la calidad del ambiente urbano, conforme a las zonas funcionales, por lo cual han sondeado y calculado la capacidad de la atmósfera y del entorno acuático, con el fin de definir racionalmente el tamaño de la ciudad y el rumbo de desarrollo, reajustar la estructura sectorial y la distribución de espacios, optimizando poco a poco la zonificación funcional de la ciudad. En medio del desarrollo urbano, muchas ciudades grandes y medianas han aplicado la estrategia de “retirarse del secundario y entrar en el terciario”, que significa que se retiran del sector secundario y entran en el sector terciario, bajo esta estrategia, han cerrado varias empresas seriamente contaminantes y han trasladado algunas empresas contaminantes fuera del perímetro urbano, valiéndose de la presión que constituyen los precios del terreno. Dichas empresas han quedado sometidas a transformación técnica y control centralizado por contaminación, a la luz del principio de que “las industrias entran al parque industrial para someterse al control centralizado de la contaminación”. Algunas ciudades combinan la transformación del viejo casco con el reajuste de la disposición urbana para resolver el problema de la suciedad, el desorden y la mala situación de la seguridad pública de las viejas zonas urbanas, así como mejorar el entorno de vida de los habitantes; se hacen asimismo grandes esfuerzos para ajustar la composición energética de la ciudad y promover la divulgación de la energía limpia y la calefacción concentrada, con el fin de aliviar la contaminación que genera la combustión del carbón. En los proyectos de construcción en las ciudades, se promueven el uso de concreto premezclado y en algunos municipios bajo jurisdicción central, capitales provinciales y algunas ciudades grandes y medianas, así como ciudades turísticas, se prohíbe revolver concreto en los terrenos de construcción urbanos, con el fin de disminuir la contaminación del polvo.

Los diversos niveles de gobierno en China colocan la prioridad de sus inversiones financieras en la construcción de instalaciones infraestructurales urbanas favorables al medio ambiente, de ahí que se promuevan las instalaciones de tratamiento de aguas residuales y desperdicios en las ciudades. Hasta fines de 2004, la tasa de tratamiento de aguas residuales urbanas llegó al 46 por ciento y la de intoxicación de desperdicios urbanos, al 52 por ciento, la tasa de cobertura forestal de las zonas urbanas ya construidas alcanzó 32 por ciento, y la tasa de utilización de energía limpia en las zonas urbanas fue de 40 por ciento. En los últimos años, el estándar estatal de escape de vehículos motorizados se ha elevado de la I etapa a la II etapa, además, se ha elaborado el estándar estatal de la III etapa. En algunas ciudades se han desplegado acciones para desarrollar vehículos motorizados limpios, a la par que se promueve activamente el uso de vehículos motorizados de combustible limpio, como gas natural de baja contaminación y gas licuado de petróleo. Desde julio de 2000, se ha suspendido en todo el país la venta y el uso de la gasolina con plomo, disminuyendo en 1.500 toneladas la emisión de plomo cada año.

En más de 500 ciudades de todo el país se ha realizado la evaluación cuantitativa del saneamiento integral del ambiente urbano y se ha cuantificado la calidad del ambiente, el trabajo del control de la contaminación y la construcción de las instalaciones de mejoramiento del ambiente urbano, con el fin de evaluar de manera integral el trabajo de la protección medioambiental en las instancias gubernamentales de las ciudades. A partir de 1997, según las exigencias del desarrollo económico, el progreso social, el perfeccionamiento de las instalaciones y el mejoramiento del ambiente, se han realizado actividades para la creación de ciudades modelo en la protección medioambiental. En la actualidad, un total de más de cien ciudades (distritos) de todo el país están empeñadas en crear la ciudad de protección medioambiental modelo, esfuerzo en el cual ya han cosechado frutos 56 ciudades y 5 distritos de las ciudades bajo la jurisdicción central. En las ciudades modelo de protección ambiental nacional, el número de días con calidad del aire de segunda categoría o mejor supera el 80 por ciento, la tasa de tratamiento de las aguas residuales urbanas es superior al 70 por ciento, la tasa del tratamiento inocuo de desperdicios diarios es superior al 80 por ciento y la tasa de cobertura de vegetación urbana es de más de 35 por ciento, índices que son todos superiores al nivel medio nacional. “El cielo límpido, el agua transparente, las tierras verdes, la tranquilidad y la armonía” se han convertido en un símbolo importante de una ciudad modelo en la protección medioambiental.

En los últimos años, el Estado se empeña en promover la reforestación de parques y jardines urbanos, construir ciudades jardín nacionales y mejorar el hábitat. Hasta fines de 2004, la tasa de cobertura de vegetación urbana de todo el país era de 31,66 por ciento, la tasa de tierras verdes, 27,72 por ciento, la superficie de tierras verdes públicas per cápita era de 7,39 m2, cifras que aumentaron en un 3,51, 4,05 y 3,7 por ciento, respectivamente, frente al año 2000. Entre éstas, la superficie de tierras verdes públicas per cápita se duplicó. En la actualidad, se ha nombrado en todo el país 83 ciudades jardín, 4 distritos jardín y 10 poblados jardín, además, 12 ciudades han obtenido el “Premio de Modelo del Entorno de Hábitat de China”.