Al tiempo de mantener el carácter avanzado, los delegados asistentes al XVI Congreso Nacional del Partido deben tener una amplia representatividad. Entre ellos se incluyen tanto cuadros dirigentes militantes de los diversos niveles como militantes que actúan en la primera línea de producción o trabajo. Debe haber delegados procedentes de los campos de la economía, la ciencia y tecnología, la defensa nacional, la legislación y la seguridad pública, la educación, la divulgación, la cultura, la salud pública y los deportes, entre otros. Los militantes obreros y campesinos deben ocupar cierta proporción y los militantes de sexo femenino y los de las etnias minoritarias también deben tener una proporción adecuada.

De entre los delegados elegidos en las provincias, regiones autónomas y municipios de jurisdicción central, por lo general los cuadros dirigentes militantes de nivel distrital y superior no exceden del 75%, los militantes que actúan en la primera línea de producción y trabajo no son menos del 25%, y las militantes mujeres y los militantes de las minorías étnicas generalmente deben tener unas proporciones superiores a las que ocupan en la militancia femenina y la de estas etnias en sendas localidades. De entre los delegados elegidos en los organismos de subordinación directa al Comité Central, los organismos estatales de nivel central, el sistema central de finanzas, el Ejército Popular de Liberación y las unidades de la Policía Armada, generalmente los cuadros dirigentes militantes de los diversos niveles no exceden del 85%, y debe haber cierto número de militantes mujeres y militantes de minorías étnicas. De entre los delegados elegidos en el sistema central de empresas, los cuadros dirigentes militantes de los diversos niveles no exceden del 75%, los militantes que laboran en la primera línea de producción o trabajo no son de menos del 25%, y debe haber también cierto número de militantes mujeres. De los delegados elegidos en las diversas entidades electoras, los militantes de 55 ó menos años de edad no deben ser, por lo general, de menos del 50%.

Los 2.120 delegados ya elegidos, que representan a los más de 66 millones de militantes del Partido, tienen un fuerte carácter avanzado y amplia representatividad. De entre ellos, los cuadros dirigentes militantes de los diversos niveles son del 75,7%; los militantes llegados de la industria, la agricultura, las finanzas y el comercio, la ciencia y la tecnología, la defensa nacional, la seguridad pública y la justicia, la educación, la cultura, la salud pública, los deportes y la primera línea de producción y trabajo son del 24,3% y el 88,5% de ellos tienen títulos de honor de individuo avanzado o modelo a nivel provincial, ministerial o superior; las mujeres, el 18%; los de minorías étnicas, el 10,8%; los de nivel de educación universitaria corta o superior, el 91,7%; y los de 55 ó menos años de edad, el 63,1%. De los delegados elegidos, el 2,5% son los que ingresaron al Partido durante la Gran Revolución, la Guerra Revolucionaria Agraria, la Guerra de Resistencia al Japón y la Guerra de Liberación; y el 97,5% son los que ingresaron al Partido después de la fundación de la Nueva China, de los cuales el 31,9% ingresaron al Partido después de la III Sesión Plenaria del XI Comité Central. Todo ello demuestra que los militantes nuevos admitidos después de la proclamación de la República Popular se han convertido en el grueso de los delegados al XVI Congreso y constituyen una importante señal de la prosperidad de la causa del Partido y de que éste cuenta con un nutrido contingente de continuadores.