Un experto señaló que el principal objetivo de Beijing ha de ser mejorar la calidad de su aire y promover el uso de energía y combustibles alternativos, controlando las emisiones de humo de los vehículos.

En Beijing, un 90 por ciento del dióxido de carbono y un 40 por ciento de las partículas en el aire provienen del consumo de carbón, mientras que casi la mitad del oxinítrido es expelido por los tubos de escape de los automóviles.

También se sugirió que se acelere la reestructuración y la mejora de las industrias tradicionales y el desarrollo de las de alta tecnología, con el fin de reducir la contaminación industrial.

Otro asesor destacó que mejorar el medio ambiente de las áreas vecinas a Beijing también es muy importante para garantizar unos " juegos ecológicos".

Llamó a las provincias y regiones autónomas cercanas a la capital a que presten mucha atención a la protección medioambiental local para hacer debidas contribuciones al éxito de los Juegos Olímpicos de Beijing.